Menú

Condenan a 83 años de cárcel al primer etarra juzgado tras el anuncio de ETA

La Audiencia Nacional ha condenado a 83 años de prisión al ex jefe de ETA Gorka Palacios, por el asesinato en julio de 2001 en Madrid de un policía nacional. Es el primer etarra que este tribunal juzga y condena tras el comunicado de ETA donde anunciaba una supuesta tregua.

Gorka Palacios, el que fuera número uno del aparato militar de ETA, ha sido condenado este lunes por la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional a 83 años de cárcel. El tribunal, presidido por la magistrada Ángela Murillo, lo considera el responsable de la muerte -junto con los etarras ya condenados por este atentado Ana Belén Egües, alias Dolores, y Aitor García- del agente de la Policía Nacional, Luis Ortiz de la Rosa.

Según consta en la sentencia, cuyo ponente ha sido la magistrada Teresa Palacios, el terrorista también es autor de un delito de estragos, de cuatro delitos de lesiones terroristas y de dieciséis faltas de lesiones. También, tal y como solicitaba el fiscal, el tribunal obliga a Gorka Palacios a indemnizar con 300.506,05 euros a los herederos de la víctima de forma conjunta y solidaria con los otros dos terroristas ya condenados y con 180.304 euros a uno de los heridos que quedó incapacitado para trabajar, así como lo multa a pagar 21.600 euros por 16 faltas de lesiones.

Los hechos se remontan al 10 de julio de 2001 cuando el grupo Buru de ETA colocó un coche bomba que explotó frente a la delegación del Ministerio de Justicia en la calle Ocaña de Madrid. Tras dar el aviso de la colocación de la bomba, el agente Ortiz acudió al lugar de los hechos para desactivar el explosivo perdiendo la vida en el intento. Asimismo, una veintena de personas resultaron heridas.
 
El tribunal, compuesto por los magistrados Ángela Murillo y los magistrados Teresa Palacios y Juan Francisco Martel, considera probado que el ex dirigente etarra participó en la elaboración del artefacto explosivo colocado en el coche-bomba y fue además quien recabó previamente toda la información del lugar para perpetrar el atentado, así como lo piso en conocimiento de Ana Belén Egues y Aitor García.

Asimismo, la sentencia destaca que fue Gorka Palacios quien robó junto a Egües el vehículo que explotó y "paralelamente se iba a encargar de efectuar la llamada reivindicativa" en nombre de ETA, algo que, si bien "no ha sido contrastado, esto "no significa que no lo hiciera".

Por otro lado, el tribunal basa principalmente su fallo en las declaraciones policiales y judiciales que efectuaron Egües y García tras ser detenidos, donde inculparon al exjefe etarra. Para la AN, estas declaraciones son "prueba más que suficiente" para condenar a Gorka Palacios.

Sin embargo, durante la celebración del juicio –celebrado el pasado miércoles en la Audiencia Nacional, siendo la primera vez que un etarra era juzgado tras la tregua de la banda criminal- los dos etarras ya condenados por estos hechos dijeron no recordar nada y haber declarado bajo torturas.

El relato de los hechos "calcado"

Ambos extremos han sido rechazados de plano por la Sala."Es de descartar las versión ofrecida por los testigos en el juicio oral, a los que como ya se ha aventurado, el único ánimo que les ha movido para explicarse como lo hicieron ha sido el de no confirmar en el plenario lo que en fases anteriores dijeron voluntariamente y que estribaba en que en el atentado por el que ya se le enjuició tuvo participación el ahora acusado Gorka Palacios", subraya el tribunal.

Además, los magistrados destacan que a pesar de la incomunicación a la que estaban sometidos los terroristas Egües y García el relato de los hechos que hicieron fue "calcado"; un elemento que califican de "crucial" entre todo el material probatorio.

"Las declaraciones de los ahora testigos fueron en su día tomadas en situación de incomunicación de ambos, de modo que no podían saber lo que el otro contaba sobre los mismos extremos sobre los que se extendieron en aquellas" (...). "No es sostenible, dada su dificultad, que se inventasen justamente por separado lo que resultó ser del mismo tenor", afirma la sentencia, que considera que "la verosimilitud" de las declaraciones se convierten en "veracidad" por las coincidencias expuestas.

"Como dato intrascendente pero revelador", la resolución judicial recoge las sonrisas que intercambiaron García y Palacios en el plenario con las que demostraron la "plena complacencia para ambos de reencontrarse", pese a que el primero había afirmado que no conocía a su compañero sino sólo de ver su cara "por fotografías en televisión". "No parece que ese agrado que ambos mostraron al verse sea propio de un saludo a quien no se conoce personalmente sino por aparecer la imagen de uno de los dos en televisión", reza la resolución judicial.
 
Por su parte, Palacios fue detenido en 2003 en Francia cuando era considerado jefe de los pistoleros de la banda terrorista, por lo que fue juzgado junto al ex dirigente Juan Ibon Fernández Iradi "Súsper" y condenado el pasado mes de noviembre a 18 años de prisión por el Tribunal de lo Criminal de París. El país galo lo ha entregado de forma temporal a España para que sea juzgado por las causas que tiene aquí pendientes aunque volverá al país vecino a cumplir condena.

Temas

En España

    0
    comentarios
    Acceda a los 3 comentarios guardados