Francisco Marhuenda y Carmen Morodo firman esta entrevista al líder de la oposición de quien dicen, "ya parece más un candidato a Presidente" y estiman que está "en su mejor momento".
Las primeras preguntas que responde Rajoy son las que tienen que ver con la política antiterrorista del Gobierno y con las sospechas, más que fundadas, de que el Ejecutivo está en plena negociación con ETA, en ese "segundo tiempo de la negociación" que acuñó Jaime Mayor Oreja. Rajoy, se apea literalmente de la postura de Mayor y dice que "no se negocia" con ETA en este momento. Con un escueto "sí" responde a la pregunta de si se siente bien informado de "todo lo que está haciendo el Gobierno en relación con ETA y de todo lo que está pasando".
Según dice: "no me preocupa que el Gobierno tenga tentaciones, sino que caiga en ellas." Además, dice que "llevamos cuarenta años hablando de negociación y eso sólo ha beneficiado a ETA. Por tanto, no se negocia, no se pueden presentar a las elecciones de ninguna manera, y a los mediadores hay que decirles que no tienen nada que mediar".
Para Rajoy, "lo más importante es mantener la política antiterrorista y mantenerla hasta el día en el que ETA anuncie que deja definitivamente las armas. Quien tiene que moverse es el que mata, no los ciudadanos de bien ni el Estado de derecho. Hay una regla de oro, la de que no se negocia".
Estatuto de Cataluña
Sobre el Estatuto Catalán, dice que "el tema del Estatuto ya está resuelto porque el TC se ha pronunciado".
Precisamente a raíz del Estatuto, Rajoy comenta que "la palabra de Zapatero ya no tiene ningún valor. Dijo que aceptaría cualquier cosa que le llegase del Parlamento catalán, que el Estatuto era plenamente constitucional y hasta dijo que lo modificaría en función de lo que dictaminase el TC".
En todo caso, "mucho mejor le iría a Cataluña si en vez de distraer la atención con esto se dedicasen más energías a buscar soluciones para los 700.000 parados que hay en la comunidad o parea conseguir que volviese a ser un motor de la economía, como hace unos años". Dice Rajoy que se siente "muy bien" cuando va a Cataluña, y que las campañas del PSOE para aislar al partido allí "ya no funcionan".
"Zapatero parece pensar que el paro, la inmigración o el cierre de miles de pequeñas y medianas empresas no son asuntos importantes. Además, el tema del Estatuto ya está resuelto porque el TC ya se ha pronunciado".
Melilla
Acerca de su visita a Melilla, dice el líder del PP que se sintió respaldado por el Gobierno. "Emitió un comunicado diciendo que le parecía bien...Aunque hubiera tenido su gracia que no le pareciera bien que el jefe de la oposición visitara una parte del territorio de España".
Rajoy aclara, de todas formas, que "estoy a favor de tener las mejores relaciones posibles con Marruecos y de trabajar en lo que nos une y no en lo que nos separa". Eso sí, desde una base de "respeto". "Hay que hablar con claridad en muchos temas en los que nos podemos entender. Y no hay que incidir en aquellos en los que puede haber más diferencias".
Las líneas rojas son, pues, "la defensa de los intereses y la integridad territorial de nuestro país y la voluntad firme de mantener unas buenas relaciones con nuestros vecinos". Ante posibles acusaciones de timidez ante Rabat, el líder el PP se defiende y considera que su "discurso es el mismo de siempre". En la cuestión del Sáhara emplaza a defender la posición de la ONU.
En la cuestión de Afganistán, en la que "de ninguna manera podemos salir derrotados", dice Rajoy que "los objetivos son más importantes que los plazos", y que nadie se plantea una retirada. Y comenta el reciente anuncio de Obama de retirar de allí sus tropas: "luego ha sido matizado por unos cuantos".