(Libertad Digital) El secretario general de UPN, Alberto Catalán, hacía estas declaraciones en La Mañana de la COPE, donde insistía en que la motivación de Rubalcaba para telefonear a Miguel Sanz no fue la de "informar" al presidente navarro, sino la de responder a sus declaraciones. Catalán, además, insiste este viernes en un artículo que publica el diario El Mundo en que el atentado de Barañáin "así como las extorsiones que siguen sufriendo los empresarios navarros" les reafirman "en la idea de que la esperanza debe ir unida a la prudencia y a la cautela".
Catalán recuerda que ETA no ha "renunciado a sus postulados" y que con el ataque al concejal "pretendía coaccionar y presionar no sólo a UPN, sino a toda la sociedad navarra", que "tiene muy claro que Navarra no es Euskadi". "Nuestra tierra ha sido, es y será sólo lo que determine la voluntad de sus ciudadanos", afirma Catalán, que insiste en que "esa voluntad, como se demuestra elección tras elección, está cada vez más alejada de las pretensiones de integrar Navarra dentro de esa quimera nacionalista que denominan Euskal Herria".
Sin embargo, recuerda Catalán, los nacionalistas vascos sienten un "deseo por Navarra indudable, insaciable y también enfermizo". Y cita también las palabras de Batasuna-ETA definiendo la comunidad foral como la "columna vertebral de Euskal Herria". Ante esta situación, "ni el PSOE ni el Gobierno de España están manteniendo una actitud clara", a juicio de Catalán, sino "condescendiente". Para ejemplificarlo, el político enumera la actitud del PSN, la ausencia de condena al atentado de Barañáin por parte de Zapatero o el hecho de que el presidente no haya incluido en su ronda de contactos a Miguel Sanz. "Que les quede claro que no nos asustan y que desde UPN se seguirá luchando por que se alcance la plena libertad, por que Navarra siga siendo lo que es y por que todos puedan defender libremente sus ideas", afirma Catalán.