L D (Agencias) Rambla hizo estas manifestaciones durante la rueda de prensa posterior al Pleno del Gobierno y al ser preguntado por la propuesta de la Generalidad catalana de trasvasar, como medida temporal y de emergencia, agua del río Segre al Llobregat.
A su juicio, el presidente del Gobierno catalán, José Montilla, "no puede sostener la política de su partido de no a cualquier tipo de trasvase, porque sus ciudadanos no lo entienden", y recordó que el planteamiento hecho por el presidente catalán una semana después de las elecciones generales es el que "siempre" defendió el PP: "pedir agua que sobra, que no utilizan y que se va al mar".
Según Rambla, después de las elecciones generales a los socialistas "se les ha visto la cara real. Se han quitado la careta y cuando tienen responsabilidad de gobierno, como el caso de Montilla, tiene que dar respuesta a las necesidades de sus ciudadanos y hacerlo sin afectar a las posibilidades de otras comunidades autónomas y como corresponde en un país cohesionado como debería ser España".
Los dirigentes socialistas, "capitaneados" por José Luis Rodríguez Zapatero, "se darán cuenta algún día del daño que su política hídrica está haciendo dentro del conjunto nacional", destacó.
El vicepresidente del Gobierno valenciano indicó que no "tiene sentido que se vaya tanta agua al mar cuando a pocos kilómetros, en Cataluña, es necesario traer con barco agua de otro extremo de España –en referencia a Almería–, con el enorme coste que supone, cuando un pequeño trasvase puede resolver la necesidades de esa comarca" catalana.
Vicente Rambla señaló que el "principio fundamental" de los trasvases es el de "no disminuir ninguna de las ventajas o de los favores que el agua que transcurre por los territorios tiene para esas comunidades o regiones. Es solo trasvasar lo que sobra, lo que se va al mar".
A su juicio, el presidente del Gobierno catalán, José Montilla, "no puede sostener la política de su partido de no a cualquier tipo de trasvase, porque sus ciudadanos no lo entienden", y recordó que el planteamiento hecho por el presidente catalán una semana después de las elecciones generales es el que "siempre" defendió el PP: "pedir agua que sobra, que no utilizan y que se va al mar".
Según Rambla, después de las elecciones generales a los socialistas "se les ha visto la cara real. Se han quitado la careta y cuando tienen responsabilidad de gobierno, como el caso de Montilla, tiene que dar respuesta a las necesidades de sus ciudadanos y hacerlo sin afectar a las posibilidades de otras comunidades autónomas y como corresponde en un país cohesionado como debería ser España".
Los dirigentes socialistas, "capitaneados" por José Luis Rodríguez Zapatero, "se darán cuenta algún día del daño que su política hídrica está haciendo dentro del conjunto nacional", destacó.
El vicepresidente del Gobierno valenciano indicó que no "tiene sentido que se vaya tanta agua al mar cuando a pocos kilómetros, en Cataluña, es necesario traer con barco agua de otro extremo de España –en referencia a Almería–, con el enorme coste que supone, cuando un pequeño trasvase puede resolver la necesidades de esa comarca" catalana.
Vicente Rambla señaló que el "principio fundamental" de los trasvases es el de "no disminuir ninguna de las ventajas o de los favores que el agua que transcurre por los territorios tiene para esas comunidades o regiones. Es solo trasvasar lo que sobra, lo que se va al mar".