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La Ertzaintza desaloja el Pleno de Azcoitia por provocaciones de los proetarras

El Ayuntamiento de Azcoitia aprobó este jueves, en un tenso pleno que obligó a desalojar al público por las provocaciones de los proetarras, la segunda moción que el grupo de PNV-EA presentó en apoyo a los asesinos de Ramón Baglietto, cuya viuda es la edil del PP de la localidad, Pilar Elías. La moción dice que los ex presos Candido Azpiazu e Iñaki Zuazolazigorraga tienen "derecho reorganizar sus vidas" después de que Azpiazu haya instalado una cristalería en el mismo edificio en el que vive la viuda.

El Ayuntamiento de Azcoitia aprobó este jueves, en un tenso pleno que obligó a desalojar al público por las provocaciones de los proetarras, la segunda moción que el grupo de PNV-EA presentó en apoyo a los asesinos de Ramón Baglietto, cuya viuda es la edil del PP de la localidad, Pilar Elías. La moción dice que los ex presos Candido Azpiazu e Iñaki Zuazolazigorraga tienen "derecho reorganizar sus vidas" después de que Azpiazu haya instalado una cristalería en el mismo edificio en el que vive la viuda.
L D (Europa Press) La moción salió adelante con los únicos votos de PNV-EA, mientras Batera, PP, el concejal no adscrito, Asier Larrañaga, votaron en contra y PSE-EE se abstuvo. El texto dice que los ex presos Kandido Azpiazu e Iñaki Zuazolazigorraga tienen "derecho reorganizar sus vidas", aunque tras las críticas que recibió de la directora de Gobierno vasco para la Atención a las Víctimas, Maixabel Lasa, PP y el PSE, entre otros, añadieron que se "reconozca el daño causado, se arrepientan y cumplan la ley". "Es entonces cuando la reinserción tendrá sentido y la sociedad verá resarcido el dolor provocado por el terrorismo", añade el texto.
 
La Audiencia Nacional acordó recientemente embargar los bienes de Azpiazu e Iñaki Zuazolazigorraga de cara a que indemnicen a Pilar Elías. Esta decisión vino precedida de la apertura por parte de Azpiazu de una cristalería bajo una vivienda propiedad de Elías. Ante la decisión judicial, fue presentada una moción por parte del "concejal no adscrito" Asier Larrañaga, miembro de una plataforma ilegalizada que entró como edil después de que el grupo independiente Batera le cediera el puesto en aplicación del artículo 182.2 de la Ley Orgánica de Régimen Electoral.
 
La moción, que fue rechazada con los votos de PNV-EA, PP y PSE-EE, fue planteada por Larrañaga, "en nombre de varios agentes y ciudadanos", y pedía al Consistorio que asumiera los gastos que supondrá para los dos condenados la decisión de la Audiencia Nacional de embargar sus bienes, además de señalar que "están sufriendo un terrible ataque mediático y pseudo-judicial". En respuesta a esa moción, PNV-EA presentó otra en la que señalaban que, como creen en la "reinserción, tras los hechos ocurridos y que están ocurriendo y viendo los pasos" dados por Azpiazu y Zuazolazigorraga "en el camino de la reinserción", reivindican su "derecho a reorganizar sus vidas".
 
Provocaciones de los proetarras
 
Antes de iniciarse el pleno, previsto para las siete de la tarde, en las inmediaciones del Consistorio se concentraron decenas de proetarras detrás de una pancarta con el texto "Eraso eta mendekurik, ez" (No a las agresiones ni a la venganza), "Konponbide demokratikoa, orain" (Solución democrática ahora), mientras gritaban "Hau al da zure pakea?", (¿Es esta vuesta paz?), "Eman hitza euskal herriari" (Dad la palabra a Euskal herria) y "Errepreziorik ez" (No a la represión).
 
Tras comenzar el pleno, la bronca comenzó cuando se iba a tratar el octavo punto de la moción del PNV-EA y el alcalde indicó que quería hacer unas manifestaciones, momento en que simpatizantes Pilar Elías apostados en las primeras filas del público sacaron carteles con el texto "Elías, herria zurekin" (Elías, el pueblo contigo), mientras proetarras ubicados en las últimas filas sacaron carteles con el texto ""Konponbide demokratikoa, orain" (Solución democrática ahora) y en los que llaman a una manifestación a celebrar el próximo sábado en apoyo a los ex presos.
 
En ese momento, ambas partes comenzaron a increparse, llamando los populares "asesinos" a los batasunos, a la vez que  mostraban su apoyo a la edil del PP con "Pilar, valiente, aquí estamos tu gente", y enseñaban otros carteles como "Asesinos, alde hemendik" (Asesinos, fuera). El otro bando sacó carteles con el texto "Eraso eta mendekurik ez" (No a los ataques ni a la venganza) y llamaban a la manifestación del sábado en apoyo a los dos miembros de ETA. Ante el aumento de los insultos y la posibilidad de agresiones físicas, agentes de la Ertzaintza encapuchados entraron sobre las siete y veinte de la tarde en el salón de plenos y echaron al público, así como a los medios de comunicación, con lo que el pleno siguió a puerta cerrada.
 
Cuando bajaban los simpatizantes del PP del pleno, los proetarras apostados tras la pancarta les llamaban "fascistas". Varias furgonetas de la Ertzaintza permanecían en el lugar en previsión de posibles incidentes. Entre el público obligado a abandonar el salón de plenos se encontraban la presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, la secretaria general del PP guipuzcoano, María José Usandizaga, la directora de Atención a Víctimas del terrorismo, Maixabel Lasa, e Iñaki Ezkerra, del Foro Ermua. Por su parte, Pilar Elías manifestó que el pleno no se tenía que haber celebrado y que el segundo texto de PNV-EA, modificado tras la intervención de la directora de Atención a Víctimas del terrorismo, "es puro maquillaje".
 
El alcalde de Azcoitia consideró  "inaceptable" la "presión político-mediática que ha sufrido el municipio", y denunció que se ha querido mostrar una Azcoitia "inexistente, porque es un municipio modelo de convivencia, y se ha  querido convertir en un pueblo que vive enfrentado". Según dijo el primer edil, en el municipio de Azcoitia existen muchas víctimas heredadas por la violencia anterior a ETA, como la Guerra Civil, "y nadie nos ha pedido perdón".

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