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Olmert ofrece a Mazen su retirada de Cisjordania y de Jerusalén este

El viceprimer ministro israelí, Haim Ramón, se ha reunido recientemente con el primer ministro palestino, Salam Fayad, y le ha ofrecido una retirada israelí de Cisjordania y de Jerusalén este. Según informa este viernes el diario israelí Yediot Aharonot, la frontera entre Israel y el futuro Estado palestino seguiría probablemente la línea de la barrera de seguridad y del muro que actualmente separan a Israel de Cisjordania.

El viceprimer ministro israelí, Haim Ramón, se ha reunido recientemente con el primer ministro palestino, Salam Fayad, y le ha ofrecido una retirada israelí de Cisjordania y de Jerusalén este. Según informa este viernes el diario israelí Yediot Aharonot, la frontera entre Israel y el futuro Estado palestino seguiría probablemente la línea de la barrera de seguridad y del muro que actualmente separan a Israel de Cisjordania.
L D (EFE) Según Yediot Aharonot , Ramón se reunió con Fayad para tratar una declaración final de principios con miras a la conferencia de paz convocada por Estados Unidos y prevista para noviembre próximo. El portavoz del viceprimer ministro israelí, Tzahi Moshe, eludió hacer declaraciones al respecto y el ministro de información de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Riad El Malki, negó la existencia de dicha reunión.

De acuerdo con la oferta de Ramón citada por el diario, la frontera entre Israel y el futuro Estado palestino seguiría probablemente la línea de la barrera de seguridad y del muro que actualmente separan a Israel de Cisjordania.

El Estado judío conservaría los grandes bloques de asentamientos israelíes y entre el 3 y 8 por ciento de ese territorio, pero cedería el mismo porcentaje de tierra a los palestinos dentro de su territorio para la construcción de un corredor que comunicará a Cisjordania con Gaza. Israel conservaría así los asentamientos de Ariel y Maale Adumim, y evacuaría otros de menor tamaño como Karnei Shomron, Beit El, Ofra, Tel Zion, y otros que no especifica el diario.

Asimismo, los palestinos que se convirtieron en refugiados en la guerra de 1948, no podrían entrar en Israel pero si a los territorios de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y se crearía un fondo internacional para financiar la rehabilitación. Los lugares santos en la Ciudad Vieja de Jerusalén estarían bajo el control de varias religiones y se retirarían las banderas que hagan referencia a un país concreto.

Según el rotativo, Olmert aprueba las negociaciones conducidas por Ramón y adoptará los resultados en caso que sean exitosos. Los contactos entre Israel y la ANP se han intensificado desde que el Movimiento de Resistencia Islámico (Hamás) tomó el control de la franja de Gaza en junio pasado tras violentos enfrentamientos con Al-Fatah, el movimiento que lidera el presidente palestino, Abú Mazén.

Como consecuencia, Mazén disolvió el Gobierno de unidad nacional y creó uno que se convirtió en interino, dirige Cisjordania y es encabezado por el primer ministro palestino, Salam Fayad. Mientras Gaza es controlada por el depuesto primer ministro Ismael Haniya, Cisjordania es gobernada por Fayad.

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