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Las víctimas rechazan el apoyo que sirve "para lavar la cara de Ibarretxe"

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco (Covite) y las fundaciones Gregorio Ordóñez y Miguel Ángel Blanco expresaron este viernes su oposición a la actuación del Gobierno Vasco en esta materia, porque "sin una política para la derrota de ETA, todo queda en papel mojado". Las representantes de estos tres colectivos acudieron al Parlamento Vasco, donde se ha celebrado un pleno monográfico sobre víctimas del terrorismo, mientras que otras asociaciones declinaron asistir. En los pasillos de la Cámara, hicieron público un comunicado conjunto crítico con la política del ejecutivo autónomo.

LD (Efe) Las tres asociaciones recordaron que hace cuatro años el Parlamento Vasco aprobó una serie de medidas de apoyo a las víctimas cuyo "incumplimiento es flagrante", y las que se han desarrollado "tímidamente no cumplen las expectativas de las víctimas", sino que son "acciones de maquillaje que intentan dar cobertura política y lavar la cara del señor Ibarretxe".

"Nosotros no seremos cómplices de una política que no defiende a las víctimas, sino que ahonda en la desvaloración y la indefensión de las víctimas del terrorismo", insistieron.

Covite y las fundaciones Gregorio Ordóñez y Miguel Ángel Blanco recordaron que ETA "ha ejercido el terror muchas veces gracias al manto de la impunidad que le proporcionaba un Gobierno vasco con el que siempre han compartido objetivos políticos y ante la indiferencia y el miedo de la sociedad en general".

También citaron que "media Cámara vasca, la no nacionalista, la oposición al Gobierno Vasco, hoy vive escoltada y con su seguridad y vida amenazada", por lo que se preguntaron "con qué falta de humanidad puede Ibarretxe espetar a su oposición amenazada que ETA no puede marcar la agenda política del País Vasco", como dijo el pasado viernes al anunciar la consulta popular.

A este respecto, insistieron en que el nacionalismo "desprecia la pluralidad de la sociedad vasca, utilizando la legalidad según sus intereses" partidistas, como lo demuestra la "última amenaza de Ibarretxe y su salto adelante convocando una consulta ilegal por inconstitucional que prometió repetidamente convocar en ausencia de violencia".

"El nacionalismo vasco ha sido incapaz de aportar soluciones para la derrota de ETA, ha rentabilizado políticamente la situación de acoso y exclusión provocada por ETA para fortificar su poder en vez de legislar y actuar con el objetivo de aislar a los terroristas y sus grupos de apoyo", recalcaron.

Estos tres colectivos acusaron al nacionalismo vasco de haber dado y seguir dando "cobertura ideológica y legitimando los fines por los que ETA mata".

Antes de dar lectura a este documento, la portavoz de Covite, Cristina Cuesta, mostró su "inmensa satisfacción" por las detenciones practicadas esta pasada noche de miembros de la Mesa Nacional de Batasuna "que sigue organizándose como ETA".

También criticó la "desfachatez sin límite" del PCTV-EHAK por haber intervenido en el pleno, cuando es un grupo que es cómplice directo del terrorismo de ETA".
 

Un consenso imposible

 
Los grupos políticos que dan soporte parlamentario al Gobierno Tripartito vasco han buscado sin éxito consensuar propuestas de resolución en torno a la política sobre víctimas del terrorismo, después de haber celebrado un debate a lo largo de esta mañana muy marcado por el clima político en Euskadi.

Pese a que desde el tripartito y Aralar se pidió que este clima, basado en el anuncio hecho hace una semana en esta misma Cámara por parte del lehendakari de celebrar una consulta popular, no influyera en el debate, el PSE-EE y el PP recordaron que esta propuesta ha molestado a las víctimas.

Tras el debate, la sesión quedó suspendida hasta la tarde, cuando los grupos presentarán sus propuestas de resolución.

En el debate Íñigo Urkullu (PNV) mostró su convencimiento de que las instituciones vascas han avanzado mucho estos últimos años en cuanto al respaldo a las víctimas del terrorismo, y añadió que, "salvo que algunos lo sigan pretendiendo, no son motivo de nuestros 'rifirrafes' diarios, de nuestros intereses partidistas".

Aun así, Urkullu pidió perdón a las víctimas "por tantos años de distancia, por haberlas tenido olvidadas y por dar la sensación de haber vivido al margen de tanta tragedia".

Rodolfo Ares (PSE-EE) recordó que este pleno se celebra en unas circunstancias políticas "muy especiales" tras la propuesta de consulta, que ha "generado confrontación y discrepancias profundas entre los partidos, preocupación y división en la sociedad vasca y la incomprensión y alejamiento, una vez más, de las víctimas del Gobierno Vasco".

Santiago Abascal (PP) denunció que "el viernes pasado en esta tribuna el lehendakari mezclaba expresamente a las víctimas con sus verdugos", y añadió que "es inadmisible que un viernes se ensucie el buen nombre de las víctimas mezclándolo con el de unos infames asesinos, y hoy se venga a un pleno monográfico como si tal cosa".

Rafael Larreina (EA) apeló a reconocer la "pluralidad de las víctimas, como reflejo de la pluralidad de la propia sociedad" y pidió que, "por encima de la coyuntura política, traslademos a la sociedad la voluntad de acuerdo y el compromiso de no utilizar a las víctimas como elemento de agresión" entre los partidos.

Oskar Matute (EB) dijo que el objetivo del pleno de hoy debe ser "poner a nuestro alcance las herramientas políticas para que no haya más víctimas" y defendió que no se "mezclen debates", en referencia al clima generado tras la propuesta del lehendakari.

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