LD (Efe) El primero de los funcionarios liberados, que al parecer fue agredido en los comienzos del motín, fue ingresado en observación en un hospital valenciano debido a los golpes que sufrió, si bien ha sido dado ya de alta y se encuentra en su domicilio, mientras que los otros dos están en buen estado.
Según han informado hoy fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, los cuatro internos depusieron su actitud después de que la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Picassent, que ayer estaba en funciones de guardia, les asegurara que serían trasladados a otras cárceles y les asegurara su integridad física.
La instructora está a la espera de que el equipo de la Policía Judicial le entregue el atestado para acordar la declaración como imputados de los cuatro internos implicados en los hechos.
Según las mismas fuentes, la jueza se trasladó a la cárcel de Picassent y a las 5,30 horas, acompañada por tres negociadores, leyó un documento a los reclusos que certificaba que si deponían su actitud serían trasladados a otras cárceles y se les garantizaría su integridad física.
Después de media hora de conversación con la jueza, los reclusos desistieron en su actitud y liberaron al rehén que quedaba, sin que fuera necesario el uso de la fuerza ni hubiera daños personales.
La directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha ordenado esta mañana el traslado urgente de los cuatro reclusos a otras prisiones.
Por otra parte, varios portavoces sindicales de ACAIP, UGT y CSI-CSIF, han denunciado hoy en rueda de prensa a las puertas de la cárcel la "mala gestión" que, en su opinión, ha desempeñado la dirección de la prisión durante el motín, ya que "quiso dar la sensación de que todo estaba controlado cuando realmente no era así".
Asimismo, los portavoces sindicales han relacionado este incidente con la masificación de la prisión, "que prácticamente duplica su capacidad", por lo que a los internos "se les mete donde hay sitio, de modo que no se respeta un principio básico como es la clasificación y separación interior".
"Los presos se creen fuertes en estos momentos, los especialistas nos dicen que es probable que debido a la actuación de ayer se puedan reproducir episodios similares en los próximos días, los internos están muy crecidos y tienen sensación de impunidad", ha dicho el portavoz de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias, Alberto Téllez.
Además, Comisiones Obreras ha denunciado en un comunicado la "falta de personal" y la "masificación" de este centro penitenciario.
El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Antoni Bernabé, ha replicado que este motín es una situación "absolutamente extraordinaria" y hace "muchos años" que no ocurría nada así, y ha defendido que la seguridad de los centros penitenciarios "está garantizada".
Finalmente, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dicho al PP que, en lugar de pedir la dimisión de la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, lo que habría que hacer es felicitarla por su gestión al frente del motín de la prisión de Picassent.
Según han informado hoy fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, los cuatro internos depusieron su actitud después de que la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Picassent, que ayer estaba en funciones de guardia, les asegurara que serían trasladados a otras cárceles y les asegurara su integridad física.
La instructora está a la espera de que el equipo de la Policía Judicial le entregue el atestado para acordar la declaración como imputados de los cuatro internos implicados en los hechos.
Según las mismas fuentes, la jueza se trasladó a la cárcel de Picassent y a las 5,30 horas, acompañada por tres negociadores, leyó un documento a los reclusos que certificaba que si deponían su actitud serían trasladados a otras cárceles y se les garantizaría su integridad física.
Después de media hora de conversación con la jueza, los reclusos desistieron en su actitud y liberaron al rehén que quedaba, sin que fuera necesario el uso de la fuerza ni hubiera daños personales.
La directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha ordenado esta mañana el traslado urgente de los cuatro reclusos a otras prisiones.
Por otra parte, varios portavoces sindicales de ACAIP, UGT y CSI-CSIF, han denunciado hoy en rueda de prensa a las puertas de la cárcel la "mala gestión" que, en su opinión, ha desempeñado la dirección de la prisión durante el motín, ya que "quiso dar la sensación de que todo estaba controlado cuando realmente no era así".
Asimismo, los portavoces sindicales han relacionado este incidente con la masificación de la prisión, "que prácticamente duplica su capacidad", por lo que a los internos "se les mete donde hay sitio, de modo que no se respeta un principio básico como es la clasificación y separación interior".
"Los presos se creen fuertes en estos momentos, los especialistas nos dicen que es probable que debido a la actuación de ayer se puedan reproducir episodios similares en los próximos días, los internos están muy crecidos y tienen sensación de impunidad", ha dicho el portavoz de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias, Alberto Téllez.
Además, Comisiones Obreras ha denunciado en un comunicado la "falta de personal" y la "masificación" de este centro penitenciario.
El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Antoni Bernabé, ha replicado que este motín es una situación "absolutamente extraordinaria" y hace "muchos años" que no ocurría nada así, y ha defendido que la seguridad de los centros penitenciarios "está garantizada".
Finalmente, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dicho al PP que, en lugar de pedir la dimisión de la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, lo que habría que hacer es felicitarla por su gestión al frente del motín de la prisión de Picassent.