L D (Agencias) Cuando falta una semana para conocer el resultado de las elecciones, Zapatero ha desvelado, en parte, cómo sería la relación con la Iglesia si ganara tras una legislatura de continuos enfrentamientos. El presidente, que ya ha criticado en otras ocasiones a la Cope y la jerarquía eclesiástica, que también celebra comicios esta semana, no duda en amenazar a los obispos. Tras el 9-M, advierte, pondrá "los puntos sobre las íes".
En una entrevista de La Vanguardia, Zapatero defendió que la jerarquía eclesiástica "tiene que mantener una relación institucional y de respeto al gobierno legítimo de España", y que tras las elecciones generales y las de la Conferencia Episcopal, si continúa en la Moncloa establecerá "unas reglas del juego que se respeten" entre España y el Vaticano.
Respecto a las reglas vigentes, dijo: "Comportan respeto. Igual que yo he tenido un respeto por el Vaticano y por el Papa más allá de mis opiniones, tanto por Juan Pablo II como como por Benedicto XVI. No se me recordará ninguna declaración que se haya podido interpretar como un ataque; cuando han estado en España, yo he estado con ellos y siempre hemos mantenido una relación institucional".
Olvidaba Zapatero con estas declaraciones las furibundas críticas que desde el Gobierno y su partido se lanzaron en su momento contra la Iglesia tras la nota de la Conferencia Episcopal y también el tono, por ejemplo, con el que suelen referirse a los obispos Felipe González o Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
En la entrevista, explicó que ha trasladado al nuncio del Vaticano que los "pronunciamientos políticos graves" por parte de los cardenales "no son lógicos en un país democrático, con las libertades garantizadas y con buena relación con el Estado Vaticano".
Preguntado por el concordato, Zapatero expuso que las tensiones actuales no son un "tema de financiación. Es de saber estar. Si sabemos estar, luego hablamos de lo otro". "Si no, cambiaremos la dirección", continuó sin concretar a qué se refiere con esa frase.
Guiños a Cataluña
Respecto a los planes del PSOE para Cataluña, Zapatero dijo que está en sus "planes" celebrar algún consejo de Ministros en esta comunidad si repite como presidente, y emplazó a "esperar" a las elecciones para opinar sobre si ve a CiU en el Gobierno. Con todo, dijo sobre este punto: "He visto que el señor Duran quería influir".
El líder socialista insistió en que aunque el Estatuto tiene por objetivo "más autonomía fiscal", ésta se debe conseguir con un modelo de financiación "que tiene que tener un principio de generalidad", según la Constitución y la Lofca. "El Estatut establece un modelo de financiación que tenemos que hacer armonizable con el conjunto del modelo de financiación", defendió.
Sobre la propuesta de ERC de referéndum de independencia para Cataluña en 2014, señaló: "Como guiño o como bandera del señor Carod Rovira puede tener un objetivo electoralista, pero nada más. Todo el mundo sabe que esto ni es realista ni es sensato".