(Libertad Digital) Según el decreto 175/2007 el Gobierno vasco establece el currículo de Educación Básica en la Comunidad Autónoma reduce el espacio del castellano hasta casi eliminarlo. Pablo Gay-Pobes, portavoz de la Plataforma por la Libertad Lingüística, asegura al diario ABC que "intentan desactivar ahora subterráneamente mediante ese decreto" la enseñanza del castellano, saltandose por el camino leyes de mayor rango.
La asociación, que agrupa a más de 2.000 padres, pide que las clases se den en castellano, y el euskera sea una lengua más. ABC subraya que la plataforma en realidad sólo reclama la supervivencia del "modelo A", y no lo que el Gobierno de Ibarretxe planea, que es superar un examen de capacitación en la lengua vasca –el modelo B- que supondría el suspenso al 70 por ciento de los estudiantes.
Gay-Poves asegura que "la clave está en que han establecido que los estudiantes al terminar la etapa de escolarización obligatoria a los 16 años deben superar un examen de capacitación en euskera de nivel B-2, que viene a ser como el "First Certificate" del inglés. Algo inviable para los que hayan seguido una educación en castellano", señala el artículo publicado el jueves por ABC.
En la entrevista de los padres de la plataforma con Tontxu Campos Granados, de EA, "le preguntamos si conocía algún país del mundo en el que no se pueda estudiar en la lengua oficial dentro de su territorio ¡y nos dice que sí, que Cataluña!. Tuvimos que recordarle que Cataluña es hoy por hoy una parte de España". "El caso de Cataluña, con ser grave, no es tan traumático como lo que se pretende instaurar en el País Vasco a muy corto plazo, cuando actualmente sólo el 15 por ciento de la población se expresa habitualmente en euskera".
El texto del decreto 175/2007 establece, según menciona ABC, que "el euskera será la lengua principal en este nuevo marco" y "ocupará un papel integrador en el sistema educativo como lengua principal".
Otra importantísima "trampa" que menciona la plataforma por la Libertad Lingüística es que el listón del nivel B-2 del euskera fuerza a los colegios a desechar el modelo en castellano, y a primar el D (por encima del B mixto, incluso). Esto significa que las subvenciones que puedan obtener los centros, de cara a obtener más recursos, dependerán de los resultados al respecto que los centros acrediten.