LD (Agencias) El PIB nacional avanzará un 2,7 por ciento en 2008, frente al 3,8 del pasado año, y casi medio punto por debajo de la actual previsión oficial del Gobierno.
Entre las causas de este crecimiento "notablemente inferior", la entidad cita algunos indicadores del consumo privado como el índice del comercio al por menor, que ya en diciembre experimentó un retroceso del 1,9 por ciento interanual, y para el que Caja España no prevé una mejora, "al menos hasta el primer trimestre del presente ejercicio".
La entidad también apunta a una "intensa ralentización" de la inversión en construcción que, por el momento, carece de algún "síntoma de mejora". En este sentido, Caja España cita algunos indicadores como el consumo de cemento, para el que augura una variación negativa, frente al crecimiento del 0,3 por ciento registrado en 2007.
Respecto a las disponibilidades de bienes de equipo, la entidad señala que la cifra del pasado mes de noviembre, que indicó una disminución en tasa interanual del 3,7 por ciento, fue uno de los "peores" datos del año, por lo que prevé que durante los primeros meses del presente ejercicio "persista la pérdida de ritmo del indicador".
Los pronósticos son algo menos negativos para la ventas interiores de bienes de equipo y software deflactadas, para las que la Caja España calcula "una moderación a lo largo del presente ejercicio".
En cuanto a la cartera de pedidos de bienes de inversión, la entidad señala que, a pesar de que su tendencia "se encuentra al alza", esta situación no se prolongará durante todo el ejercicio, sino que tenderá a una desaceleración "intensa", sobre todo si el consumo privado sigue perdiendo ritmo a las mismas tasas a las que lo está haciendo actualmente.
Desde el punto de vista de la oferta, la entidad subraya la "prolongación de la pérdida de ritmo" de las actividades industrial, constructora y de servicios, y pone como ejemplo el Índice de Producción Industrial (IPI), cuya tendencia "muestra un agudo proceso de desaceleración" que podría prolongarse "al menos durante el primer trimestre del año".
El número de parados crecerá un 4 por ciento
Lo mismo pasaría con el gasto turístico, que ya muestra una "moderada desaceleración" que Caja España calcula que persista en los primeros meses de 2008. Respecto al mercado laboral, la entidad prevé un crecimiento del número de parados del 4 por ciento "para el conjunto de 2008", y sitúa la tasa de paro en una horquilla de entre el 8,4 y el 8,8 por ciento.
Asimismo, los datos de ocupación seguirían "con la desaceleración actualmente existente", que podría suavizarse, o incluso experimentar "un suave cambio de tendencia", en el último tramo del presente ejercicio. En concreto, Caja España prevé un crecimiento de la ocupación del 2,6 por ciento para el conjunto del año, cinco décimas menos que en 2007 y 1,5 puntos menos que en 2006. Asimismo, el aumento de la población activa permanecería en torno a los niveles actuales, de entre el 2,7 y el 2,8 por ciento.