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Montilla tacha de "broma de mal gusto" la promesa de Zapatero sobre el trasvase del Ródano

José Montilla ya tiene opinión sobre la promesa estrella de Zapatero en la sesión de investidura. Dice que es una "broma de mal gusto" que el presidente se comprometa a estudiar el trasvase del Ródano ya que, en el mejor de los casos, no beneficiaría a Barcelona hasta dentro de catorce o quince años. Para el presidente de la Generalidad, Rodríguez Zapatero "distrae al personal" haciendo este tipo de promesas.

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José Montilla ya tiene opinión sobre la promesa estrella de Zapatero en la sesión de investidura. Dice que es una "broma de mal gusto" que el presidente se comprometa a estudiar el trasvase del Ródano ya que, en el mejor de los casos, no beneficiaría a Barcelona hasta dentro de catorce o quince años. Para el presidente de la Generalidad, Rodríguez Zapatero "distrae al personal" haciendo este tipo de promesas.
(Libertad Digital) Según ha informado la Cadena Cope, José Montilla considera que el posible trasvase del Ródano, promesa estrella de Rodríguez Zapatero en la sesión de investidura, no es solución para la sequía que vive Cataluña y, en especial, Barcelona. "Es una broma de mal gusto" ha llegado a decir el presidente de la Generalidad, en declaraciones desde Marruecos.
 
En este sentido, ha recalcado que los problemas de agua necesitan de medidas inmediatas mientras que el trasvase del Ródano, en el mejor de los casos, estará en funcionamiento dentro de catorce o quince años. Siempre y cuando "Francia y España lleguen a un acuerdo", ha apostillado.
 
"No es solución para la sequía", ha sentenciado. Según José Montilla, el presidente del Gobierno "distrae al personal" haciendo este tipo de promesas.
 
Dice que las reticencias de Zapatero sobre el Segre son "discutibles"
 
Sobre el trasvase del Segre, propuesto por la Generalidad, Montilla remarcó que el informe elaborado por el Gobierno central sobre este asunto "es muy discutible", porque "los caudales de los ríos, especialmente en la cabecera y cuando se nutren de la nieve, son siempre discutibles".
 
El presidente catalán advirtió al Gobierno central que no aceptará que "se cierre la puerta al trasvase del Segre sin ofrecer alternativas reales" que den una solución a la emergencia. Aseguró que el Ejecutivo catalán "está abierto a otras soluciones" más allá de la captación del Segre, pero señaló que las alternativas que se han estudiado hasta ahora no ofrecen suficientes garantías de que puedan estar acabadas en octubre.

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