(Libertad Digital) El Partido Popular ha hecho públicos los datos globales de las asambleas locales celebradas entre el lunes y el martes para elegir a los compromisarios que tendrán voz y voto en el XVII Congreso de Valencia y, previsiblemente, aclamará a Mariano Rajoy como presidente del partido.
Según explica el propio PP en un comunicado, se han convocado 1.294 asambleas y en 1.077 el número de compromisarios que se han presentado ha coincidido exactamente con el número de personas que debían ser elegidas, con lo que sólo se han celebrado votaciones en 217. El plazo para presentar reclamaciones finaliza 48 horas después de la votación y, hasta este momento, se han impugnado seis asambleas: una en Madrid, dos en Alicante, otras dos en Huesca y otra en Granada.
El PP recalca que la elección se ha efectuado mediante lista abierta y se ha podido presentar cualquier afiliado no suspendido de militancia, siempre que esté al corriente de pago y que lo haya solicitado ante la junta local o de distrito correspondiente. Siendo esto verdad, resulta muy esclarecedor la coincidencia en casi todas las asambleas locales del número de aspirantes y plazas disponibles, cuando el número varía en cada municipio. Otro dato que no se puede soslayar es que un número muy importante, la mayoría, de los elegidos son cargos públicos y dirigentes vinculados a los aparatos regionales del partido.
En estas asambleas provinciales se ha elegido a 2.500 compromisarios de los 3.025 que asistirán al Congreso de junio. El resto son los 485 compromisarios natos –pertenecientes a la Junta directiva nacional– y los 40 electos en el exterior.
En estas asambleas provinciales se ha elegido a 2.500 compromisarios de los 3.025 que asistirán al Congreso de junio. El resto son los 485 compromisarios natos –pertenecientes a la Junta directiva nacional– y los 40 electos en el exterior.
Ahora ha comenzado la carrera por conseguir los avales. Para presentar una candidatura al Congreso se necesita que el 20 por ciento de los compromisarios la avalen. Y un compromisario sólo puede avalar una candidatura, a diferencia de lo que ocurre en el PSOE, donde al margen de la candidatura que se apoye se pueden avalar las que el compromisario considere oportunas.
Según informaciones que han llegado a Libertad Digital y lo que se ha publicado en otros medios, el entorno de Rajoy ha puesto la maquinaria del partido a trabajar –cuenta con el apoyo de casi todas direcciones regionales, con la excepción de Madrid– para recabar el mayor número de avales en el menor tiempo posible para Mariano Rajoy. El objetivo sería superar el 80 por ciento, lo que cerraría el paso a cualquier candidatura alternativa. Es difícil pero no imposible, teniendo en cuenta que la mayoría de los compromisarios son cargos y dirigentes próximos al aparato, y que muchos de ellos son profesionales de la política.