Menú

Pekín cifra más de 8.500 los muertos en el terremoto de 7,8 grados en la escala Richter

Al menos 8.553 personas han muerto en el terremoto de 7,8 grados en la escala abierta de Richter que hoy sacudió el suroeste de China, el peor en 30 años en el país asiático, según fuentes oficiales. Los heridos suman unas 10.000 personas, según las cifras provisionales de la oficina gubernamental para la coordinación de las labores de rescate que se ha constituido en la provincia de Sichuan, la más afectada.

Al menos 8.553 personas han muerto en el terremoto de 7,8 grados en la escala abierta de Richter que hoy sacudió el suroeste de China, el peor en 30 años en el país asiático, según fuentes oficiales. Los heridos suman unas 10.000 personas, según las cifras provisionales de la oficina gubernamental para la coordinación de las labores de rescate que se ha constituido en la provincia de Sichuan, la más afectada.
LD (EFE) El seísmo tuvo su epicentro a 31 grados latitud norte y 103 latitud este, cerca de la localidad de Wenchuan (noroeste de la provincia de Sichuan), una zona muy turística ya que allí se encuentran tres lugares de la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, entre ellas dos reservas naturales.
 
El fuerte seísmo se notó en buena parte de Asia Oriental, incluyendo ciudades a casi 3.000 kilómetros de Wenchuan, como Hanoi (Vietnam), Bangkok (Tailandia) o las metrópolis de Pekín o Shanghai, en donde cientos de personas salieron de sus casas alarmadas por el temblor.
 
En las tres horas posteriores al terremoto, los centros sismológicos nacionales detectaron más de 300 réplicas, algunas de hasta seis grados.
 
"Estaba en un restaurante y las lámparas del local comenzaron a moverse mucho, parecía que aquello iba a caerse", relató a Efe Mercedes Rubio, una española residente en la ciudad de Chongqing, una de las localidades que notaron con mayor intensidad el terremoto.
 
"Todo el mundo está en la calle, es algo impresionante", añadió la española, algo que confirmaron las imágenes de la televisión estatal china CCTV, que mostraron a miles de personas en las calles de otras urbes como Chengdu, esperando a que pase el peligro.
 
"Hemos notado un fuerte movimiento, nunca habíamos vivido algo así en Chengdu. Se ha cortado la luz", afirmó por teléfono una portavoz de el Ayuntamiento de esa ciudad, en la que, según los periodistas, algunos edificios presentan grietas.
 
Las cifras de víctimas van llegando con cuentagotas, aunque las localidades a un radio de menos de 100 kilómetros del epicentro ya han asegurado que la devastación es inmensa y los muertos sólo en esas localidades se cuentan por miles.
 
Sólo en Beichuan, a unos 50 kilómetros al noreste de Wenchuan, se cifran entre 3.000 y 5.000.
 
En Dujiangyan, una turística ciudad donde se encuentra la obra hidráulica más antigua del mundo, un instituto se derrumbó atrapando en su interior a unos 900 estudiantes.
 
Los servicios de rescate de esa ciudad han recuperado por el momento 50 cadáveres en los escombros.
 
Entretanto llegaron a través de la agencia estatal, Xinhua, nuevas cifras de muertos en provincias que en algunos casos se encuentran a cientos de kilómetros de allí: 57 en Shaanxi (centro norte), 26 en Gansu (noroeste) y 50 en Chongqing (entre ellas cuatro niños sepultados en los escombros de una escuela).
 
El terremoto, que golpea a un país que intentaba entrar en una atmósfera festiva con ocasión de los Juegos de Pekín 2008, ha producido el corte de las comunicaciones por móvil en muchas de las zonas afectadas, además de los servicios de Internet.
 
Aeropuertos de ciudades como Chengdu cerraron temporalmente, y muchos vuelos desde o al oeste y centro de China fueron suspendidos.
 
Las provincias afectadas por el terremoto suman una extensión de más de 1,3 millones de kilómetros cuadrados, donde viven más de 200 millones de personas.
 
Cerca del epicentro se encuentra una de las principales reservas de osos panda de China, en Wolong (con la que se ha perdido la comunicación), y más al este la Presa de las Tres Gargantas, aún en obras, que según los expertos no ha sufrido daños.
 
Wenchuan, zona del epicentro, está habitada por unas 111.800 personas, muchas de ellas tibetanas, y el pasado mes de marzo fue uno de los lugares donde se produjeron protestas contra el Gobierno chino, en la prefectura de Aba.
 
En la misma zona del norte de Sichuan, un terremoto de menor intensidad (7,5 grados) ocurrido en 1933 causó 9.000 muertos.
 
Testigos en zonas afectadas en Sichuan y Yunnan afirmaron haber visto "cuadras enteras" reducidas a escombros, mientras numerosos heridos y afectados son atendidos en plena calle por equipos médicos.
 
El país entero se ha movilizado ante la catástrofe: el primer ministro, Wen Jiabao, viajó con carácter de urgencia a la zona del epicentro, desde la que pidió al país que reúna "calma, confianza, coraje y una organización eficiente" para superar el desastre, y pidió a los equipos de rescate que "superen el miedo y la fatiga".
 
Unos 8.000 soldados del Ejército de Liberación Popular han sido enviados para colaborar en las labores de rescate en las zonas afectadas, a las que ya han llegado las primeras ayudas de la Cruz Roja nacional en forma de mantas y tiendas de campaña.
 
El oeste del país, zona de fricción de las placas tectónicas india y asiática, experimenta con frecuencia seísmos de mayor o menor intensidad, aunque en muchas ocasiones se producen en zonas poco pobladas o deshabitadas.
 
El peor terremoto sufrido por China en las últimas décadas fue el que en 1976 asoló la ciudad de Tangshan, a unos 200 kilómetros al sureste de Pekín, de 7,8 grados y que causó entre 240.000 y 280.000 muertos.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios