LD (Agencias) En su discurso ante el Parlamento de Israel, el presidente de EEUU, George Bush, rechazó las sugerencias de quienes le han instado a negociar con el líder iraní, Mahmud Ahmadineyad. Aseguró que esas posibles conversaciones estarían bajo el mismo tono complaciente que el mostrado por los países europeos hacia las exigencias de Adolf Hitler antes de la Segunda Guerra Mundial.
Bush también dijo que su Gobierno seguirá oponiéndose, al igual que Israel, a las ambiciones nucleares del régimen iraní. Así, aseguró que Ahmadineyad "sueña con devolver a Oriente Próximo a la Edad Media y pide para que Israel sea borrado del mapa". "
El presidente estadounidense insistió: "Algunos parecen creer que deberíamos negociar con terroristas y radicales, como si algún argumento ingenioso fuera a persuadirlos de que estuvieron equivocados todo el tiempo. Hemos escuchado antes est ilusión tonta" porque "mientras los tanques nazis cruzaban Polonia en 1939, un senador estadounidense declaró: 'Señor, si sólo hubiera podido hablar con Hitler, todo esto podría haberse evitado'. Tenemos la obligación de llamar a esto como lo que es: el falso consuelo de la contemporización, que ha sido repetidamente desacreditado a lo largo de la historia".
En EEUU, esas declaraciones han sido interpretadas como un reproche a Barack Obama, aspirante a la candidatura presidencial del Partido Demócrata, quien aboga por conversar, sin condiciones previas, con los dirigentes de países hostiles a EEUU, como Irán y Cuba. Obama reaccionó rápidamente, acusando al presidente de hacer un "ataque político falso". Pero la Casa Blanca negó que Bush estuviera refiriéndose al senador por Illinois cuando censuró a quienes le instaron a hablar con "terroristas y radicales".