LD (M. Llamas) El ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, afirmó el pasado mes de febrero que la cifra de extranjeros sin papeles presentes en España apenas alcanzaba las 300.000 personas. Dicho cálculo está basado en la diferencia existente entre tarjetas de residencia y empadronados.
Sin embargo, tal y como avanzó entonces Libertad Digital, las cuentas del Gobierno incluían una trampa: La comparación de dos indicadores que se llevaban un año de distancia. Así, el ex ministro restó a la cifra de extranjeros empadronados (tan sólo disponible entonces a 1 de enero de 2007) (4.519.554), los residentes legales (con tarjeta de residencia), cuyas cifras estaban actualizadas a 31 de diciembre de 2007 (3.979.014).
El nuevo padrón del INE viene a confirmar el maquillaje estadístico elaborado por el Gobierno. Así, el avance del Padrón Municipal a 1 de enero de 2008 refleja un aumento de la población de 862.774 habitantes respecto al año anterior. De este total, 5,22 millones son extranjeros, de los cuales 3,1 son ciudadanos extracomunitarios.
La diferencia entre extranjeros empadronados y residentes legales asciende en realidad a 1,22 millones de sin papeles. De éstos casi la mitad proceden de países extracomunitarios. Así pues, la cifra total de irregulares casi multiplica por cuatro los cálculos del Gobierno. De hecho, como mínimo, los duplica, en caso de que no se contabilicen los europeos residentes en España, pero que carecen de la correspondiente tarjeta de residencia (más de tres meses viviendo en el país).
En concreto, España cuenta en la actualidad con 5.220.577 extranjeros empadronados. El 11,3 por ciento de la población total residente en España, tal y como recoge graficamente el blog wonkapistas.
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Evolución de la población en los últimos 12 años
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Extranjeros empadronados (cifras absolutas y % del total de la población)
A 31 de diciembre de 2007, residían en España 3,9 millones de personas con nacionalidad extranjera. Esto es, alrededor de 1,2 millones menos que los que estaban empadronados a 1 de enero de 2008.
De éstos, cerca de 585 mil extranjeros constan como ciudadanos de la UE 27 (incluyendo también a Noruega, Islandia y Liechtenstein y Suiza), pero carecen de certificado de registro (requisito administrativo), pese a que es muy probable que vayan a residir o hayan residido en España más de tres meses (plazo legal que determina la estancia turística). Pese a ello, tal certificado es de obtención automática desde el mismo momento en el que se comprueba la nacionalidad europea.
Sin contar a dichos sin papeles, los inmigrantes irregulares presentes a día de hoy en España, y según la contabilización oficial, se elevaría a 656.076 personas (1,24 menos los 585.000 empadronados europeos sin certificado de registro). Es decir, más del doble de los anunciados por Caldera.
Así pues, un volumen muy próximo al que se encontró el PSOE a su llegada al poder en 2004, y que sirvió de excusa para llevar a cabo una regularización masiva de extranjeros.