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Mari Mar Blanco desmiente haber recibido las presiones difundidas por PRISA

La nueva vocal del Comité Ejecutivo del PP María Mar Blanco, hermana del concejal de Ermua asesinado por ETA Miguel Ángel Blanco, desmintió este jueves "tajantemente" que haya recibido ninguna presión para que no aceptara el ofrecimiento del líder de los 'populares', Mariano Rajoy, de formar parte de la directiva del partido. Los medios de PRISA informaron este miércoles profusamente de las supuestas presiones recibidas por Mari Mar Blanco del entorno de María San Gil.
 
L D (Agencias) María del Mar Blanco reconoció que, tras conocerse la propuesta de Rajoy en el Congreso Nacional del PP celebrado en Valencia del 20 al 22 de junio, recibió "muchísimas llamadas". "Algunas me dieron la enhorabuena de una forma muy efusiva y otras quizás no tan efusivas", apostilló. En este sentido, María del Mar Blanco aludía, a preguntas de los periodistas, a "informaciones publicadas tras el Congreso Nacional" que apuntaban que la nueva vocal de la ejecutiva del PP había recibido llamadas que cuestionaban este nombramiento por parte del entorno de la todavía presidenta del PP vasco, María San Gil.
 
"En ningún momento he recibido ninguna llamada del entorno de María San Gil o de cualquier otro entorno para presionarme o para dejar el Comité Ejecutivo", apostilló. "Estamos hablando de personas adultas, cada una es muy libre de tomar una decisión y, además, aquí estamos hablando de personas a las que nos une la amistad y la defensa de la libertad de una tierra tan maravillosa como es el País Vasco", añadió. María del Mar Blanco abogó por que el PP se mantenga "unido" ya que, dijo, a los miembros de este partido les "une demasiadas cosas para que encima intentemos malmeter o dividir".
 
La presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco hizo estas declaraciones antes de la inauguración en Madrid de la exposición fotográfica 'En pie de foto. El terrorismo, crimen contra la humanidad", organizada por dicha fundación de víctimas del terrorismo. A la exposición, que ha recorrido ya 25 ciudades y que vuelve a recalar en la capital por segunda vez, asistió una amplia representación de la corporación municipal, encabezado por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, el vicealcalde, Manuel Cobos, o la concejala de Medio Ambiente, Ana Botella. Además, también acompañaron a Blanco el diputado Gabriel Elorriaga y el europarlamentario y ex presidente del PP vasco Carlos Iturgaiz, entre otros.
 
Los medios de PRISA informaron este miércoles profusamente de las supuestas presiones recibidas por Mari Mar Blanco para que no entrase en la ejecutiva de Rajoy. Según El País, la jefe de Gabinete de María San Gil, había telefoneado a Blanco el sábado por la mañana para acusarla de haberse prestado a servir de tapadera a Rajoy después de forzar la salida de la aún presidenta del País Vasco. "La conversación no fue nada agradable", llegó a decir el periódico de PRISA.
 
El periódico aseguró también que Jaime Mayor Oreja no saludó a Mari Mar Blanco el domingo cuando se cruzó con ella en el Congreso. "Mari Mar Blanco se tomó ese incidente como una auténtica bofetada", dramatizó el periódico del grupo de comunicación preferido ahora por Rajoy. Y el lunes, continuaba narrando El País, la hermana del concejal asesinado recibió otra llamada, esta vez de Cristina Cuesta, otra víctima de ETA y gerente de la Fundación Miguel Angel Blanco. Según estos medios, Cuesta le reprochó que entrara en la ejecutiva de Rajoy y le dijo que esta decisión no había sido bien entendida por varios patronos de la Fundación.

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