L D (EFE) El acto, en el que han participado centenares de mozos vestidos de blanco y rojo, y que ha sido seguido con expectación por numerosas personas desde los balcones y el vallado del recorrido y en la misma plaza de toros, anuncia la inminente llegada de los Sanfermines, el próximo fin de semana, y sirve de promoción de la ciudad en cerca de 140 países.
De hecho, el acto organizado por la escudería que patrocina la casa de bebidas energéticas, ha contado con el apoyo del Ayuntamiento de Pamplona y el Gobierno de Navarra, que además de colocar en el recorrido como única marca la turística de "Reyno de Navarra", han facilitado su desarrollo con el cierre del recorrido y medidas similares a las que se disponen en un encierro real.
Así, tras el disparo de un cohete anunciador de su inicio, aunque con cierto retraso respecto a la hora prevista de las 08:00, los dos monoplazas han salido desde la zona de los corrales de Santo Domingo para recorrer, conducidos por los mozos, los más de 800 metros de trazado del encierro, pasando por la Plaza del Ayuntamiento, Mercaderes, Estafeta y Telefónica hasta entrar en el coso taurino. Allí los pilotos han premiado a los centenares de espectadores que aguardaban su entrada con dos trompos que han sido ovacionados por el público allí presente, que ha podido seguir el resto del recorrido desde su inicio a través de dos grandes pantallas instaladas en la Plaza de Toros, al igual que ocurrirá a partir del día 7 de julio con los encierros de toros.
Pese a la escasa velocidad imprimida a las máquinas, el ruido ensordecedor ha llenado las calles del Casco Viejo, un adelanto de la exhibición que a las 17:00 horas de hoy tendrá lugar en la Avenida del Ejército, donde sobre un recorrido de 2 kilómetros los pilotos intentarán poner su bólidos a 240 kilómetros por hora. Los pamploneses han tenido ocasión de conocer estos días de cerca los dos bólidos, que han estado expuestos desde el miércoles en la Plaza del Castillo, desde donde ayer se trasladaron en un "encierrillo" como el de los toros el día previo a su lidia, hasta los corrales de Santo Domingo.