L D (Agencias) Maragall, que ha participado en la celebración del 30 aniversario del PSC, ha recordado a los más de 600 dirigentes y afiliados del partido que han asistido al acto que "una de las asignaturas pendientes" del partido es tener su propio grupo parlamentario en Madrid. El PSC renunció a él tras el golpe de Estado, pero "esto tiene que volver", según Maragall
Precisamente, el PSC celebrará la próxima semana su congreso, en el que, dentro de las 4.800 enmiendas a la ponencia, cinco están encaminadas a reclamar que el PSC tenga "voz propia en Madrid", y una de éstas a recuperar sin más dilaciones un grupo propio en el Congreso. Dijo que una de las asignaturas pendientes del partido es ese grupo en la Cámara Baja perdido tras el golpe de Estado, cuando se unió al del PSOE en favor de la unidad durante uno de los grandes baches de la transición. Pese a ello, constató que aquél golpe de 1981 "afortunadamente está superado y casi olvidado".
Asimismo, hay dos enmiendas que de forma específica reivindican que el PSC siga trabajando en Madrid dentro del grupo socialista, como viene haciendo desde 1982. No obstante la propuesta no causó ni un solo aplauso, pese a que los éstos fueron constantes durante todo el acto cada vez que algún otro dirigente le citaba durante las sucesivas intervenciones. Además, buena parte del público se puso en pie al principio y al fin del discurso del propio Maragall.
El ex presidente, que en octubre de 2007 se dio de baja como militante socialista, también ha animado al PSC a convertirse en el primer partido en España que en el futuro celebre elecciones primarias para elegir a sus máximos dirigentes, tal y como sucede en Estados Unidos. "Sois libres de hacer lo que queráis", pero "los que lo hagan os pasarán adelante", ha subrayado Maragall, que aún es afiliado de "Ciutadans pel Canvi".
Precisamente, el PSC celebrará la próxima semana su congreso, en el que, dentro de las 4.800 enmiendas a la ponencia, cinco están encaminadas a reclamar que el PSC tenga "voz propia en Madrid", y una de éstas a recuperar sin más dilaciones un grupo propio en el Congreso. Dijo que una de las asignaturas pendientes del partido es ese grupo en la Cámara Baja perdido tras el golpe de Estado, cuando se unió al del PSOE en favor de la unidad durante uno de los grandes baches de la transición. Pese a ello, constató que aquél golpe de 1981 "afortunadamente está superado y casi olvidado".
Asimismo, hay dos enmiendas que de forma específica reivindican que el PSC siga trabajando en Madrid dentro del grupo socialista, como viene haciendo desde 1982. No obstante la propuesta no causó ni un solo aplauso, pese a que los éstos fueron constantes durante todo el acto cada vez que algún otro dirigente le citaba durante las sucesivas intervenciones. Además, buena parte del público se puso en pie al principio y al fin del discurso del propio Maragall.
El ex presidente, que en octubre de 2007 se dio de baja como militante socialista, también ha animado al PSC a convertirse en el primer partido en España que en el futuro celebre elecciones primarias para elegir a sus máximos dirigentes, tal y como sucede en Estados Unidos. "Sois libres de hacer lo que queráis", pero "los que lo hagan os pasarán adelante", ha subrayado Maragall, que aún es afiliado de "Ciutadans pel Canvi".
Por ello, recordó que ya se convocaron unas primarias cuando él se convirtió en candidato: "Votaron 60.000 personas, y eso que no era ni legal; pero se hizo, y salió bien", lo que sí arrancó los aplausos de los asistentes. "Sois libres de hacer lo que queráis", admitió, pero advirtió de que si no son pioneros en eso, "lo harán otros".
Un presidente catalán del Gobierno
Maragall, que ha echado en falta la presencia de Narcís Serra en este acto, al que no ha podido asistir por encontrarse de viaje, ha dicho que Serra "estaba llamado a ser el presidente del Gobierno". Subrayó que González le nombró vicepresidente cuando "aparcó" a Alfonso Guerra de ese cargo, aunque finalmente esta opción "no pudo ser".
"Creo que la intención de Felipe González era llevar a Narcís Serra a la presidencia del Gobierno español. Venía de ministro de Defensa y fue escalando por su inteligencia, habilidad y firmeza. Serra estaba llamado a ser el presidente del Gobierno y no pudo ser porque González no plegó", ha indicado Maragall.
Maragall ha aprovechado la efeméride para rememorar sus primeros años de militancia política y algunas "batallitas" de su época de joven político de izquierdas. Así, ha recordado que su "nombre de guerra" político era Simón, y ha explicado que hace muchos años la policía le decomisó unos archivos políticos de gran valor que tenía guardados en casa de su amigo Xavier Rubert de Ventós.
"Fui a la persona de España que más sabe de dónde está todo, Alfredo Pérez Rubalcaba, que me dijo que estaban en el cuartel de Simancas, pero tampoco, ni Rubalcaba los encontró, de manera que si alguien sabe alguna cosa, que me lo diga", ha señalado, entre las risas de los asistentes.
Con su presencia en este acto, el ex mandatario catalán se ha reconciliado con el PSC, el partido que, "políticamente", le ha permitido vivir los años "más felices" de su vida.
"Fui a la persona de España que más sabe de dónde está todo, Alfredo Pérez Rubalcaba, que me dijo que estaban en el cuartel de Simancas, pero tampoco, ni Rubalcaba los encontró, de manera que si alguien sabe alguna cosa, que me lo diga", ha señalado, entre las risas de los asistentes.
Con su presencia en este acto, el ex mandatario catalán se ha reconciliado con el PSC, el partido que, "políticamente", le ha permitido vivir los años "más felices" de su vida.