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El asesino del autobús en Canadá: “Por favor, matadme”

Un juez canadiense ha ordenado el examen psiquiátrico de Vince Weiguang Li, acusado por la policía de asesinar y decapitar a su pasajero de asiento en un autobús, después de que dijese en el tribunal que quería que alguien le matase. Li, de 40 años de edad, compareció este martes por segunda vez ante un juez de la localidad de Portage la Prairie, en el centro del país, desde que fue arrestado el pasado jueves.

L D (EFE) Tras una hora de vista, durante la que el fiscal describió lo ocurrido en el autobús, el juez ofreció a Li la oportunidad de hablar pero el acusado se limitó a musitar, "por favor, matadme", dijo la televisión canadiense CTV. El juez ordenó que Li sea evaluado psicológicamente, proceso que se iniciará el próximo jueves. Li tiene previsto comparecer de nuevo ante el juez el próximo 8 de septiembre. Tanto hoy como el pasado viernes, Li se ha negado a estar representado por un abogado.

Durante la vista, el fiscal dijo que Li permaneció en el autobús rodeado por la policía durante cuatro horas tras supuestamente asesinar a puñaladas y decapitar a Tim McLean, un joven de 22 años de edad que regresaba a su hogar en la ciudad de Winnipeg. El fiscal añadió que Li fue finalmente detenido cuando rompió una de las ventanas del autobús, arrojó un cuchillo de grandes dimensiones y unas tijeras y saltó del vehículo para entregarse a la policía.

Según testigos que viajaban en el autobús, Li atacó violentamente a McLean aparentemente sin ningún motivo. Garnet Caton, que viajaba una fila por delante de donde se sentaban la víctima y su atacante, declaró que tras oír un grito desgarrador vio al atacante "de pie con un cuchillo de supervivencia, apuñalando al otro pasajero 50 ó 60 veces. Corrí hacia el conductor y le dije que parase el autobús". "Todo el mundo se bajó mientras el atacante, con toda la calma del mundo, cortaba a la víctima", añadió el testigo.

Durante el fin de semana apareció en internet una grabación policial en la que se da a entender que tras el asesinato, y mientras permanecía encerrado en el autobús rodeado por la policía, Li descuartizó y devoró parte del cuerpo de McLean. En la transmisión se puede oír a un agente a pie del autobús decir que Li tiene en su poder un par de tijeras y un cuchillo de grandes dimensiones y que "está profanando el cuerpo en estos momentos". Posteriormente añade que el atacante "está en la parte trasera del autobús, cortando trozos y comiéndolo".

Conocidos de Li, que emigró a Canadá en el 2004 procedente de China y trabajó repartiendo periódicos y en un restaurante de la cadena McDonalds, han señalado que el acusado siempre se mostró como un hombre apacible y trabajador.

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