LD (Efe) Además de estas acciones terroristas, la organización asesina ha cometido otros atentados en estos dos últimos años en los que han muerto seis personas: dos ciudadanos ecuatorianos, tres guardias civiles y el ex concejal socialista en Mondragón Isaías Carrasco.
Tras el atentado en Barajas, en el que fallecieron los dos ecuatorianos, ETA ha hecho explosionar los siguientes coches bomba:
- En la madrugada del 24 de agosto de 2007 un coche bomba explotó en un aparcamiento situado junto al cuartel de la Guardia Civil en Durango (Vizcaya) y causó heridas leves a dos agentes y daños materiales muy cuantiosos.
- El 26 de agosto de ese año una autocaravana cargada con alrededor de cien kilos de explosivos estalló en Cuevas de Vinroma (Castellón), a 30 metros de una torreta eléctrica. Un comando de ETA explosionó el vehículo al darse cuenta de que había sido detectada por la Guardia Civil.
- El 9 de septiembre siguiente los artificieros de la policía desactivaron un coche bomba, cargado con 61 kilos de explosivos, frente a la sede del Ministerio de Defensa en Logroño (La Rioja). El artefacto no explotó debido a un fallo en el cordón detonante.
- El 21 de marzo de 2008 un coche-bomba cargado con 70 kilos de explosivos estalló junto al cuartel de la Guardia Civil de Calahorra (La Rioja) y causó heridas leves a un agente y a otras cuatro personas.
- En la madrugada del 14 de mayo la explosión de un coche bomba colocado en la puerta de la casa cuartel de la Guardia Civil en Legutiano (Álava) causó la muerte del agente Juan Manuel Piñuel y heridas a otros cuatro.
- Cinco días después otros coche bomba, cargado con 60 kilos de explosivo, estalló junto al club Marítimo El Abra, en el paseo marítimo de Guecho (Vizcaya).
- La madrugada del 21 de septiembre de 2008, ETA atentacontra la sede central de la alavesa Caja Vital en Vitoria sin causar heridos y unas horas después ha hecho estallar un coche bomba junto a la comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa (Vizcaya) en el que han resultado heridas siete personas.
- La madrugada del 22 de septiembre de 2008, pocas horas después de que ETA intentará provocar una masacre en el País Vasco, la banda asesina logra su objetivo y acaba con un militar en Santoña (Cantabria).