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La caída del consumo y el precio del crudo elevan un 8,4% el déficit comercial español

La pérdida de competitividad de la economía española, y la caída del consumo de las familias y empresas ha aumentado la brecha exterior nacional en más de 4.600 millones de euros. En los siete primeros meses del año, el déficit comercial ha crecido un 8,4 por ciento respecto al mismo periodo de 2007. En julio, la menor demanda interna ha lastrado el crecimiento del valor de las importaciones hasta el 5,1 por ciento, tres veces menos que lo contabilizado un año antes. A pesar de ello, Miguel Sebastián está "satisfecho".

A la cola de Europa en competitividad y productividad
La pérdida de competitividad de la economía española, y la caída del consumo de las familias y empresas ha aumentado la brecha exterior nacional en más de 4.600 millones de euros. En los siete primeros meses del año, el déficit comercial ha crecido un 8,4 por ciento respecto al mismo periodo de 2007. En julio, la menor demanda interna ha lastrado el crecimiento del valor de las importaciones hasta el 5,1 por ciento, tres veces menos que lo contabilizado un año antes. A pesar de ello, Miguel Sebastián está "satisfecho".
LD (L. Ramírez) Las empresas españolas tienen problemas para vender sus productos al exterior, lo que ha provocado que el ritmo de crecimiento de las exportaciones pierda vigor con respecto al pasado ejercicio, según los últimos datos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio publicados.
 
Así, frente al repunte del 7,4 por ciento que registraron las ventas españolas al exterior entre enero y julio de 2007, en los siete primeros meses del presente año la tasa descendió dos décimas, para situarse en el 7,2 por ciento.
 
En cuanto a las compras al exterior, éstas también sufrieron una desaceleración en lo que va de año, debido a la crisis económica nacional, que ha generado una caída del consumo de empresas y familias.  Además, el efecto comparativo del petróleo (que el pasado año creció menos que en lo que llevamos de 2008) ralentizó las importaciones, que crecieron un 7,6 por ciento en términos de valor, frente al repunte del 7,9 por ciento contabilizado entre enero y junio de 2007.
 
Con todo ello, el déficit exterior español creció un 8,4 por ciento en los siete primeros meses de este año, para situare el volumen total en los 59.514,4 millones de euros. Esta cifra supera en más de 4.600 millones de euros la brecha existente en el mismo periodo de 2007.
 
Atendiendo a las cifras mensuales de julio –las últimas publicadas este jueves- las exportaciones crecieron un 12,2 por ciento respecto al mismo mes de 2007 (cinco décimas menos), mientras que las importaciones se incrementaron un 5,1 por ciento, es decir, tres veces menos que en julio de 2007, cuando subieron un 15,4 por ciento.
 
A pesar de que estas cifras ponen de manifiesto los problemas comerciales de la economía española, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio considera que la evolución es buena. Así, el comunicado del departamento que dirige Miguel Sebastián destaca que, en términos de balanza comercial, este julio arroja “el quinto mejor dato de los últimos 15 años”.
 
Miguel Sebastián está "satisfecho"
 
Incluso, Sebastián manifestó su "satisfacción" en sede parlamentaria este jueves respecto a estos datos y se centró estrictamente a la evolución del mes de julio. Sebastián dijo que el déficit comercial se ha reducido en julio, pese al aumento récord del precio del petróleo. Esta afirmación no es del todo exacta, ya que en julio de 2008 el déficit exterior creció en 8.012 millones de euros, frente a los 8.661 millones de euros del mismo mes de pasado año. Así, el déficit no se reduce, sino que crece menos.
 
En esta línea argumental el ministro obvió los datos acumulados en lo que va de año y se mostró "optimista" sobre la "magnífica" evolución de las ventas española al exterior. Aseguró que la actividad exportadora ha tomado el relevo, en un momento de la economía que pasa por la "atonía de la demanda interna", y que "lo seguirá haciendo con más intensidad en los próximos meses".
 
Asimismo, apuntó que en la actual crisis económica es una "oportunidad" aumentar la base exportadora y seguir reduciendo el "crónico" déficit comercial.
Para ello, explicó que el Gobierno ha diseñado un conjunto de medidas con cuatro objetivos: mejorar la diversificación geográfica de las exportaciones, aumentar el valor añadido de los bienes y servicios exportados, incrementar el número de empresas exportadoras y mejorar la imagen de España en el exterior.
 

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