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Lucas Soler

Verano con Ketchup

El aumento de las temperaturas en verano nos trae siempre un repertorio de canciones ligeras que servirán de persistente fondo sonoro a las noches de agobiante calor. Entre los temas que ya se están escuchando en discotecas y verbenas populares figura Aserejé, una canción tan pegadiza como el nombredel trío de chicas que la interpreta: las Ketchup.

En tan sólo un par de semanas, las hermanas Muñoz (Lola, Lucía y Pilar) se han situado con el single de su canción en los primeros puestas de ventas, desbancando incluso a las hordas melosas de Operación Triunfo. De momento, Las Ketchup ya han vendido más de veinte mil copias de Aserejé. La canción es en realidad una original versión aflamencada de Rapper's Deligth, el primer éxito de la música "rap" y con el que se dio a conocer el grupo norteamericano Sugar Hill Bang a finales de la década de los setenta.

Además de su frenético ritmo y de las originales coreografías de sus intérpretes, el éxito de Aserejé reside en su letra, que está escrita en un curioso idioma abstracto: "Aserejé, ja dejé, tejebe tude jebere sebinuoba". No se trata de una recuperación de la poesía fonética de vanguardia, pero recuerda a la sonoridad de algún dialecto bereber. Dadas las dificultades que ofrece esta surrealista sarta de onomatopeyas para ser memorizada, el vídeo promocional de la canción ofrece la letra en subtítulos. De este modo, se garantizan también que sea un éxito en los karaokes.

Tan curioso como la letra de la canción es el nombre artístico que han adoptado las hermanas Muñoz, pues las Ketchup son hijas del músico flamenco "Tomate". La devoción al padre también se extiende al nombre de su primer disco, "Las hijas del Tomate", que se presentó en Madrid hace unos días en una multitudinaria rueda de prensa. En la presentación, las Ketchup se definieron como un trío ecléctico que interpreta temas de reggae, rumbas y hasta lo que ellas denominan "sevillanas-blues”. Esta claro que apuestan por el mestizaje musical, pero sin las irritantes pretensiones intelectuales de otros músicos más respingados.

En un momento en el que el público empieza a estar saturado del continuo bombardeo publicitario de los primeros discos y las giras veraniegas de los chicos de Operación Triunfo, resulta reconfortante la aparición de unas jóvenes que no han pasado por la Academia. Sin tener el apoyo mediático de Rosa López, Bustamante o Bisbal, Las Ketchup están abriendo una brecha de aire fresco en el panorama de la música popular. Al igual que sucedió con Sonia y Selena, prematuramente olvidadas después de su éxito del año anterior "Yo quiero bailar", el trío cordobés tiene garantizado un verano muy movido, entre las galas televisivas y las actuaciones por plazas mayores y polideportivos. Corren el riesgo de ser olvidadas cuando se inicié el otoño, pero ellas son conscientes de que la fama es efímera y más aún cuando el único mérito es ser las intérpretes de la canción del verano. Al menos, conseguirán que miles de españoles consigan tararear la complicada letra de Aserejé como si fuesen beduinos.

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