Rato y Montoro se han tomado a broma que a BBVA y BSCH les parezca bien, y hayan aplaudido, la propuesta de reforma fiscal que viene planteando el PSOE de Zapatero y Jordi Sevilla (entre unos cuantos más, excluidos Borrell y Guerra). ¿Deben burlarse o preocuparse? La gran banca suele saber muy bien por dónde soplan los vientos, y saben situarse perfectamente mirando al porvenir.
Porque, sencillamente, se han limitado a hacer los pertinentes números, y resulta que les viene mejor el proyecto PSOE que la realidad PP en materia fiscal. En ambos casos, lo frívolo parece que es burlarse, de antemano, de las propuestas del principal adversario, que no tiene por qué ser, necesariamente, tonto del bote.
Los bancos se alinean
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