Felicidades don Pablo. Magnífico artículo con el que estoy en total acuerdo. Y es que ¿cómo vamos a pedir justicia en los innumerables casos de corrupción en las filas zejateras, si luego nos atrevemos a disculpar o disimular un caso flagrante y descarado como éste?
Sabido lo que gustan tirar del "y tú más", no podemos cometer la torpeza de darles argumentos. El villano a la cárcel, y si encima se pone chulo ante su señoría, con dos collejas en el pescuezo.
Son estupendos los artículos de Pablo Molina. Tienen una naturalidad y una gracia enorme, aparte de contar verdades molestas vengan de donde vengan. Que aprendan los voceros del Partido Zapateril Asqueroso.

Secundo la moción. Autonosuyas NO!