Menú
Guillermo Dupuy

ETA quiere cobrar de los contribuyentes

ETA no va a tener ningún inconveniente en renunciar temporalmente al impuesto revolucionario si cree que con ello favorece la posibilidad de seguir nutriéndose del contribuyente. Ya habrá tiempo para volver a la doble financiación, ¿verdad Erkicia?

No creo desvelarles nada si les digo que la principal fuente de financiación de la organización terrorista ETA es, desde hace mucho tiempo, la que le ha procurado y sigue procurando el Estado español a través de las retribuciones públicas que cobran sus terminales políticas en las instituciones. Teniendo este hecho bien presente, es perfectamente lógico que la banda terrorista trate de sacar el máximo provecho al instrumento que consideran, desde un punto de vista estratégico, más conveniente –y creo que con razón– para no perder esa portavocía política y financiación pública, como es su último anuncio de tregua. No es que su tregua haya dejado de ser una tregua, no: el alto el fuego de los terroristas, si hemos de creerlos, sigue siendo un cese meramente temporal de la violencia, que sigue estando condicionado a la consecución de aquellos objetivos por los que han venido asesinando y convocando treguas en el pasado. Lo que ha pasado es que los terroristas acaban de incluir expresamente en ese cese temporal de la violencia la cancelación de la extorsión a los empresarios, según han hecho público los presidentes de las patronales vasca y navarra.

Se trataría, efectivamente, de la primera vez que la banda terrorista anuncia la cancelación del mal llamado "impuesto revolucionario", cosa que no debería sorprender a nadie si no fuera porque la tramposa clase política y mediática que padecemos nos ha hecho creer lo contrario en el pasado con sus tramposos "informes de verificación". Eso, por no hablar de la sistemática ocultación, política y mediática, de los irredentos y chantajistas términos en los que la banda terrorista siempre ha fijado sus treguas.

Con todo, esta cancelación del impuesto revolucionario seguiría siendo tan temporal y condicionada políticamente como lo han sido todos los "alto el fuego" de ETA. Que yo sepa, la banda terrorista no ha sustituido su chantajista anuncio de tregua por un anuncio de rendición y disolución, incondicional e irreversible. Y, que yo sepa también, la apenas velada amenaza de Otegui de hace unos meses en Gara señalando que "nuestra presencia en las elecciones de mayo es fundamental para abordar la irreversibilidad del proceso" sigue estando vigente.

Con todo, no quiero dar la impresión de que no me parezca importante la cancelación de las cartas de extorsión anunciada por los terroristas. Este anuncio va a fortalecer el poder anestesiante que tienen los ceses de la violencia, aunque sean temporales y condicionales, para una clase política y mediática, ya de por sí proclive a maquillar las chantajistas treguas de la ETA como si de anuncios de rendición y arrepentimiento se trataran. Lo que me parece evidente es que la ETA no va a tener ningún inconveniente en renunciar temporalmente al impuesto revolucionario si con ello favorece la posibilidad de seguir nutriéndose del contribuyente. Ya habrá tiempo para volver a la doble financiación, ¿verdad Erkicia?

En España

    0
    comentarios