El asunto de las vacaciones tampoco está bien tratado. Oficialmente los profesores tenemos UN MES de vacaciones, el de agosto. El mes de julio está teóricamente dedicado a actualización de conocimientos y realización de cursillos (como no hay pasta ni cursillos realmente interesantes (los que organizan los sindicatos son de coña mayormente: una coartada para repartir dinero público entre su clientela), y estamos a disposición de la Administración (te pueden llamar en cualquier momento y si estás por ahí, ya puedes buscarte la vida para volver). Pero, en todo caso, me remito a lo expuesto en mi anterior comentario: que se compute de verdad, y frente al funcionario promedio, cuántas horas, efectivas, trabaja un profesor y se actúe en consecuencia en cuanto a horas lectivas y períodos vacacionales (¿acaso en los demás países no tiene más vacaciones los profesores? Por algo será, ¿no?).
Por supuesto no voy a participar en una huelga convocada por unos sindicatos que han sido siempre cómplices de la venida de la perniciosa LOGSE (que a mí me convirtió de profesor de Bachillerato en “profesor-cuidador” de primaria para estabular en cada aula, en parte, a un grupitos de adolescentes maleducados y sin interés por aprender apenas nada), y en algunas Comunidades, encima, cómplices de la “normalización lingüística” llevada a cabo por los fascionacionalistas (de todos los partidos, PP incluido, que diría Hayek). También son los cómplices de un sistema que permite que un opositor que obtenga en conocimientos un 9 sea superado en el cómputo de total del proceso de selección por un interino que apenas haya aprobado en conocimientos. Creo imprescindible un modelo que aumente la competitividad (y acabe con el pernicioso igualitarismo pijo-progre-socialero por abajo. Un bachillerato de cinco cursos (tres de básico + dos de superior para los que deseen ir a la Universidad, con lo que nos podíamos ahorrar un curso en ésta para los graduados). Con las correspondientes “reválidas”, por supuesto.
En mi próximo, y último por el momento, comentario haré una propuesta que considero razonable y homologable a lo que se hace en los países más avanzados y con los modelos más exitosos.
Desde luego Libertad digital se ha lucido. No puedo estar más en desacuerdo. Ahora resulta que los malos son los profesores. Argumentos manipulados a base de medias verdades exhibiendo todos los topicazos rancios para denostar a los profesores. Si tan privilegiados son los profesores, el que quiera que se apunte que la oposición tien turno libre. De hecho yo pondría obligatorio, una semana con el horario de un profesor medio y el que aguantara sin rechistar darle el doble de sueldo. Pero cómo se puede ser tan irresponsable y hablar sin conocer el trabajo de un profesor más allá de una superficial consulta "estilo wikipedia"??? Tengo argumentos tumbativos contra esta piltrafa irresponsable de texto pero estoy tan cabreado que mejor será callarme un rato. Valor supremo el recorte, por encima de todo y de todos. Si, hay que recortar pero no esto ni así. El político, culpable, le ha `pasado la patata al profesor, inocente, y libertaddigital sigue mansurronamente la estrategia dictada. LAMENTABLE.
Este asunto no se puede despachar con argumentos simplistas y hablo con conocimiento de causa porque soy profesor desde hace muchos años. No se trata simplemente del nº de horas trabajado, sino de cómo son esas horas. Veamos unas cuantas cosas:
1) No es lo mismo tener que impartir clase en un aula con 15-20 alumnos, como ocurre en los países más avanzados que tener que hacerlo a un grupo de 25-30. Personalmente prefiero 25 horas semanales lectivas en el primer caso que 20 en el segundo.
2) También hay que tener en cuenta el nº de alumnos a los que uno imparte clase. Si uno imparte una materia de 4 horas semanales y tiene 20 horas lectivas con grupos de 20 alumnos, imparte clase a 100 alumnos (5 grupos y 5 evaluaciones por trimestre), mientras que si imparte materias de 2-3 horas semanales, se encuentra con 8 grupos y 8 evaluaciones por trimestre (160 alumnos). Y piénsese lo que puede ser si se trata de materias con 2 horas semanales, 20 horas lectivas y grupos de 25 alumnos (total: 10 grupos diferentes y 250 alumnos, una locura). Un profesor que imparta clase a 150 alumnos y le dedique a cada alumno, por diferentes conceptos (corrección de pruebas incluido), semanalmente 5 minutos fuera del horario lectivo, tendría que dedicar 12,5 horas semanales a ello (muy por encima de las 7,5 que se destinan al efecto en su jornada laboral no presencial). Y como tenga una tutoría "complicada" la cosa se complica de manera notable.
3) Es absurdo equiparar horas de trabajo de profesiones muy dispares. Cualquiera algo informado sabe que no es lo mismo una hora de trabajo de un cirujano en un quirófano que una de un administrativo común o de un dependiente de una tienda. Una hora de clase con un grupo de 25 alumnos de comportamiento "medio" (actual) en un centro de secundaria equivale, cuando menos, a 1,5 horas (y me quedo corto) lectivas: si se imparten 20, tenemos una equivalencia mínima de 30 horas. Si uno da clase a 150 alumnos y ha de dedicarle un cierto tiempo a cada uno de ellos, además de preparar las clases y a eso se añaden guardias (que eso es otra, ¿por qué han de encargarse del orden y la seguridad en los centros y fuera de las aulas titulados superiores? ¿Acaso en los hospitales o en Hacienda ocurre lo mismo?), reuniones de departamentos y coordinación, evaluaciones, claustros, actividades complementarias (y si te cae instruir un expediente disciplinario complejo en el que está implicado un especimen “duro de roer” y con unos padres gilipuertas, mejor no hablar), pues puede que alguno se le quiten las ganas de hablar tras sumar las horas de trabajo efectivas (nos iríamos cerca de las 50 semanales)
Continúa.
A la vista de
- los desastrosos resultados que ofrece la educación pública,
- que la enseñanza privada, como era de esperar, obtiene resultados mucho mejores que la pública, incluso aplicando la LOGSE en los mismos barrios.
creo que deberíamos plantearnos urgentemente la privatización total de la enseñanza, o como mínimo la financiación de todos los centros, públicos o de iniciativa social, mediante el cheque escolar.
Ya está bien de que los hijos de los trabajadores no tengan oportunidades de mejorar porque los políticos les obligan a asistir a centros públicos de pésima calidad.
No voy a decir si hay los profesores tienen que trabajar más horas o menos. No voy a decir si la enseñanza necesita más austeridad. Ahora bien, aceptando (se puede debatir) que el horario de los profesores fuera generoso, no se que tiene esto que ver con que la educación esté a la cola, salvo que se esté diciendo que los profesores trabajan (mucho o poco) muy mal.
Entiendo más bien que el problema de la calidad es otro tema diferente. Porque el que hoy imparte 18 horas mal, será capaz de impartir 20 horas igual de mal, y el aumento no supondrá mejora. Y el que imparte 18 bien, no creo que imparta 20 mejor.
Por cierto, y hablando de empleos a tiempo parcial, tan presentes en países como Holanda, Alemania... Existimos profesores que estaríamos dispuestos a trabajar menos horas (las 18 horas directas nos fatigan mucho, aunque algunos no lo crean) renunciando a la parte correspondiente del salario, facilitando con ello que puedan trabajar personas que están en paro. Lo he planteado a Sindicatos y Administración desde hace años, y sigue sin ser posible.
Con respecto a las 18 horas de docencia directa (100% trabajo, sin pausas ni distracciones), hay que sumar las guardias de profesores que están de baja y no se sustituyen. Y para los que creen que no se hace ningún trabajo más en el centro, que pregunten, que el horario de permanencia en el centro en Secundaria, realizando tareas (no corrigiendo ni preparando clases) ha sido siempre de 30 horas semanales.
Y que tengan cuidado otros, porque cualquier día les dirán a los bomberos, que como no están en el incendio casi nunca, que pueden trabajar sesenta horas a la semana
Cierto, no se alarga una semana laboral de 37,5 horas. Se queda como estaba.
Tambien es cierto que de la semana laboral de 37,5 horas hay más de doce horas que no son horas presenciales en el centro.
Lo que también es cierto es que el número de dias trabajados al año es menor que el de la mayoría de los trabajadores. De hecho, seguramente dobla los dias de vacaciones de un trabajador de otros sectores.
Hay que aprovechar esta ocasión para implantar el cheque escolar y privatizar todos los colegios públicos.