Rajoy es un anormal.
Disculpe la crudeza pero si no lo digo reviento
ZP lo era en un grado distinto, básicamente por la vía iluminativa, con tendencia a la grandilocuencia y la verborrea como cualquier dictador sudamericano.
Este, aparte otros caracteres, es especialista en escapismo
Recibir en Moncloa en el sofá y ceder el sillón al huésped como norma, huir hacia el garaje en el Congreso con tal de no afrontar a los periodistas, esa cara de boxeador sonado al aterrizar en Corea mientras lo cumplimentaban las tropas, aquella referencia a la final de la Eurocopa en Polonia, su cara de pazguato cuándo a poco de ser elegido asistió a su primera reunión europea, aquella primera comparecencia de apenas 30 segundos para anunciar su gobierno,
En fin para qué seguir.
Un caso clínico.
Tampoco es extraño, el rey, sin ir más lejos, no le anda a la zaga intentando ejercer de macho alfa con sus 75 años, con tal de negarse que se va a morir como todo hijo de vecino.
Así que me temo que lleva usté razón don Emilio, el problema de comunicación ante tanta incoherencia no lo arregla ni el mejor especialista en imagen salvo que alguien antes convenza a Rajoy para que se ponga en manos del loquero. Y eso no serán los sorayos ni los marhuendas ni los ninis quevedos quien se lo recomienden.
Sólo nos queda rezar si somos creyentes (incluso si no lo somos con más motivo) y esperar.
Cuando se pone de ministro de economía a alguien con tal parecido a
Chiquito de la Calzada es evidente que nada puede ir bien...incluso olvidando que era ejecutivo de Lehman Brothers (como para dar confianza a los mercados)

No, no tenemos a un anormal como presidente del gobierno sino a un registrador de la propiedad: sangre horchatada, sin ideología, timorato, indeciso. La antítesis de lo mejor del PP: Esperanza Aguirre.