Menú
Federico Jiménez Losantos

Una Presidencia 'cum fraude': del 'Blanco-boy' al 'negro Plagión'

Lo legalmente establecido es que la Universidad quite el título de doctor al que lo adquirió sin merecerlo y sancione a los que a sabiendas lo otorgaron.

Lo legalmente establecido es que la Universidad quite el título de doctor al que lo adquirió sin merecerlo y sancione a los que a sabiendas lo otorgaron.
La tesis de Pedro Sánchez. | Europa Press

Fábula de Blanquito y Plagión

Érase que se era un país de nubes sometido al tirano Zetapé. Su visir Pepiño Blanco promocionó a un grupo de guapos jóvenes, los 'Blanco boys', para echar a la vieja guardia del antiguo rey Tigrekán II. Y en la capital, a un tal Tomás Gómez debía reemplazarlo un tal Blanquito Sánchez, que era tan guapo como ignaro. Hubo que fabricarle una sabiduría y se recurrió a un negro llamado Plagión. A las órdenes del visir Blanco, los magos Cortés Elvira y Miguel Sebastián artillaron una llamada tesis doctoral sustentada en el plagio y fiada en el favor. Pero Plagión se vengó de sus negreros al plagiar la tesis y publicarla luego como libro del negro, no del amo. La incompetencia del trabajo esclavo (anunciada por el sabio Escohotado) se mostró tan clamorosamente que el Tribunal tuvo que completar la tesis. Todos se olvidaron de Plagión, pero hete aquí que un día el guapo Sánchez llegó al Poder y unos merlines descubrieron el pastel del plagio. No se sabe si los buenos serán capaces de obligar a los malos a digerirlo y devolverlo.

Ahora en serio: un cuento de terror

El presidente del Gobierno ha amenazado a tres medios de comunicación -ABC, okdiario y El Mundo- con acciones penales si no rectifican una serie de informaciones que concluyen lo mismo: Pedro Sánchez no llegó a doctor en Económicas tras redactar una tesis original sino aprovechando el trabajo de tres 'negros', dos de los cuales formaron parte del tribunal que le obsequió (y se obsequió) con la nota de apto cum laude. Cum fraude, si los tres medios citados dicen la verdad. Si estos medios han mentido, difamado y calumniado, el presidente del Gobierno tiene el derecho y la obligación de llevarlos ante los tribunales y probar, bajo juramento, este asunto. Los tres medios ya han respondido editorialmente que no se retractan y que se ratifican en todo lo publicado, acusando a Sánchez de querer amordazarlos. No cabe pues término medio: o mienten los medios o miente el presidente.

Amenaza por twitter, ridículo por facebook y ataque por burofax

La amenaza de Sánchez a los medios, sin especificar cuáles, tuvo lugar a las 7 de la mañana, por Twitter y la agencia Europa Press. Ese día y el siguiente, el Presidente del Gobierno añadió en Facebook una larguísima requisitoria con fallos de redacción impropios de un bachiller y en la que afirmaba cinco cosas: que adoraba la docencia; que "por razones obvias, no había tenido tiempo de investigar"; que su tesis era "fruto del esfuerzo de uno y el esfuerzo de muchos"; que su familia se sintió muy orgullosa el día en que la defendió y el Tribunal la calificó cum laude; y que las calumnias sobre su autoría provienen de los que no aceptan la llegada al Gobierno de una nueva forma de hacer política y a la apertura de un nuevo "espacio social", de izquierda y de progreso.

Poco después, llegó el burofax presidencial contra Inda, Rubido y Rosell, reaccionaron editorialmente estos medios, se alinearon con Sánchez PRISA, el diario de Escolar y las televisiones, especialmente TVE, ya más sectaria que La Sexta y un reciente huésped de Mateo ha posado de Pilatos. Mientras, el Gobierno, empezando por la portavoz y acabando por Borrell -que ha liquidado el equívoco prestigio que tenía- han insultado a los citados medios y a los partidos PP y Cs, que piden la comparecencia de Sánchez en el Congreso para explicar la catarata de plagios que inunda la tesis según la detallada denuncia de ABC y okdiario y que el Tribunal -como detalla El Mundo- regaló el título a un amasijo de informes oficiales cortipegados al tuntún por un 'negro', presuntamente Carlos Ocaña, jefe de gabinete de Miguel Sebastián que había denunciado en la primera etapa de Sánchez que el 90% de la tesis se hizo en su Ministerio, y algo aún más asombroso: que dos de sus miembros, la presidenta y un vocal, habían co-publicado ya un artículo con el propio Sánchez un mes antes de que éste lo defendiera como un capítulo de su tesis, sin citarlos y sin citarse. La ignorancia de Sánchez sobre cómo se hace una tesis -y cómo se hizo la suya- se ha demostrado al defender frente a ABC que no puede ser plagio citarse a sí mismo, que es precisamente lo que se entiende por autoplagio y está totalmente prohibido.

La mentira en el Parlamento

La mentira inaugural de esta catarata de revelaciones sobre el mayor escándalo doctoral en muchos años en la ya escandalosa historia reciente de la Universidad española la protagonizó el propio Sánchez cuando Rivera le pidió que la enseñase para acabar con los rumores, intensísimos desde que empezó la cacería del máster de Casado y atronadores tras dimitir Montón. Sánchez, que en vez de pedir a la presidenta que llamara al orden al líder de Cs y se atuviera a la pregunta, adoptó su peor estilo matonesco y dijo que su tesis como "doctor de (no en) Economía" estaba accesible en Teseo.

Pero lo único accesible era la ficha. Él había prohibido el acceso a la tesis y hasta que se fotografiara el único ejemplar que guardaba la UCJC. Tan falso era que podía consultarse, como dijo el miércoles, que el jueves anunció que podría consultarse el viernes. Aunque lo hizo tras precederlo de dos métodos de escaneo antiplagio, uno de los cuales decía que el autor había plagiado menos del 1%; y otro, casi el 15%. Diferencia abismal, a la que el encargado del escaneo severo añadió que ellos sólo buscan indicios, que luego deben comprobarse sobre los textos.

La Universidad debería despojarle del título

Por desgracia para Sánchez, su Gobierno, su partido y sus corifeos, lo que han hecho los tres medios amenazados no es pasar un escáner, sino ir al texto de la tesis y han demostrado que la mayor parte se publicó a nombre del "negro" Ocaña; y una parte menor, a nombre de los que premiaron la tesis que en parte habían escrito. Lo que se dice una chapuza monumental. Lo legalmente establecido es que la Universidad quite el título de doctor al que lo adquirió sin merecerlo y sancione a los que a sabiendas lo otorgaron. Sobre el plagio oceánico de la tesis, tal vez de Ocaña, ver Chicote en ABC. Sobre las irregularidades clamorosas del tribunal, ver Negre en El Mundo. Y sobre ambos escándalos y la génesis del doctorado exprés de Sánchez, ver Carlos Cuesta y otros en okdiario.

La maldición de Cuelgamuros

Ante estas investigaciones, diferentes pero complementarias, este presidente cum fraude ha respondido a través de Izbestia (antes El País) y El Colp de Falç (antes La Vanguardia) con una grosera manipulación del currículo de Albert Rivera (como ha demostrado en LD Mariano Alonso) y la vicepresidenta ha dicho, casi aullado, que lo importante es el máster de Casado y la profanación de la tumba de Franco. Lo primero es falso. Lo segundo, un crimen de lesa patria con maldición incorporada. Fue votarse la exhumación de Franco y precipitarse la de la tesis. Y se viene encima la inhumación de un Gobierno que debe resistir la tormenta que neciamente él desató. Si resisten PP y Cs, se lo llevan por delante. Al menos, a las urnas.

Temas

En España