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David Vinuesa

Cholo sí vs Cholo no, el debate extremista del Atlético más 'Pupas'

No hay término medio: Cholo fuera o Cholo no te vayas nunca. El Atlético recupera una guerra civil que parecía olvidada.

No hay término medio: Cholo fuera o Cholo no te vayas nunca. El Atlético recupera una guerra civil que parecía olvidada.
Cholo sí vs Cholo no, el debate extremista del Atlético más 'Pupas' | EFE

Han pasado diez años en los que el Atlético de Madrid, con rachas mejores o peores, ha logrado éxitos que algunos ya ni recordaban en territorio rojiblanco. Por ponerlo en contexto, de 1996 a 2010, el Atlético no visitó Neptuno en ninguna ocasión y estuvo catorce años de sequía además de pasar un par de temporadas en el pozo de la Segunda División. En esta última década, el conjunto rojiblanco ha ganado dos ligas, dos Europa League, dos Supercopa de Europa, una de España y una Copa del Rey. Son ocho títulos que, más allá de que hayan sido con Simeone, deberían haber suprimido cierta programación mental pupista de la afición. Pero no ha sido así. Es un hecho que pese a todo lo conseguido, el pupismo es resistente a todo y genera una serie de debates extremistas que lo único que hacen es condenar al propio Atlético.

En más de una ocasión he dicho en estas mismas líneas, en la radio y también en Twitter que señalar a un único culpable en todo esto es poner un parche a la situación. Se está viendo por ejemplo en el Sevilla. ¿Era culpa de Lopetegui? Pues parece que Julen se ha disfrazado de Sampaoli y sigue ahí, porque la cosa va igual o peor. Volviendo al Atlético, el debate ahora mismo es demasiado radical: "Cholo vete ya" o "Cholo no te vayas nunca". Y eso se amplía con el "Joao Félix no tiene la culpa" y el "Simeone tiene razón con Joao Félix". Ni lo uno ni lo otro, señoras y señores. Esto no es tenis, un deporte en el que falla o acierta uno solo. Tampoco es pádel, que va por parejas y es solo cosa de dos. Esto es un equipo de fútbol con un entrenador y 20 tíos en el vestuario. Y ojo, gente en la directiva, que a veces se nos olvida que hay una parcela que vive feliz en la sombra. Hay responsables de la parcela deportiva en las oficinas del Civitas Metropolitano. Porque hasta donde yo sé, Simeone y Joao Félix no fichan, no venden y tampoco traen jugadores lesionados que llegan en septiembre y debutan en noviembre.

Focalizar el debate en dos personas es ocultar el problema y pongo un ejemplo de por qué el Atlético tiene más problemas de los que ocuparse que solo de esta relación entre Simeone y Joao Félix en la que por cierto sigo manteniendo que ambos son culpables por cabezonería. Ayer me dio por preguntar a varias personas qué harían con su idea de echar al Cholo. Les pregunté por el plan que pondrían sobre la mesa después de la salida del argentino. Aparte de que la mayoría piden a Luis Enrique, Klopp o Tuchel, lo más común entre ellos es la petición de salida de entre 8 y 11 futbolistas. Y claro, fichajes. ¿La culpa es de Simeone, pero pides ocho o más salidas? Me suena raro. Si el culpable es único, su salida sería la solución, pero pedir que se marche el Cholo y además media plantilla demuestra que es un problema compartido, no individual.

El Atlético está perdido en una guerra civil cholista y anticholista que permite vivir muy cómodos a los que de verdad deberían estar preocupados. En la directiva ya tienen chivo expiatorio. Si la cosa va mal, no es por malos fichajes, ventas extrañas, ausencia de refuerzos, camisetas horrendas y falta de identidad. Si la cosa va mal es culpa del Cholo. ¡Escudo protector activado! Por otro lado está el propio Simeone, que tampoco ve que algunas de sus decisiones son equivocadas y que la guerra profe-alumno con Joao Félix está lastrando al equipo. Y por último están los jugadores, que tienen excusas absolutamente para todo. Ojo, con el permiso de Simeone y de Gil Marín que siguen poniendo el listón de la exigencia en acabar en puestos Champions. Os muestro parte del catálogo de excusas: la culpa es del Cholo, el sistema no me gusta, no me pone donde quiere pero luego me voy fuera y tampoco lo hago bien, me lesiono y no se por qué, hemos tenido mala suerte, no sabemos por qué salimos dormidos en las primeras partes, los árbitros nos tienen manía, hacemos una fase de grupo de la Champions horrible pero nos hemos dejado la vida en la segunda parte frente al Leverkusen... y así día tras día con el consentimiento del que les pone en el campo, Simeone, y del que les paga los sueldos, Gil Marín.

Como han podido leer, la opinión que doy no es de cholista extremo ni de anticholista extremo. Tampoco digo que sea solo culpa de la directiva o de los jugadores. Está repartida. En la misma columna he dado un tanto por ciento de culpabilidad alto a cada una de las partes implicadas en todo esto. Aún así, como esa guerra civil está desbocada, me toca aguantar de vez en cuando que en el mismo tuit me digan que soy casi primo hermano del Cholo o todo lo contrario, que voy a por él. Señoras y señores, que no va por ahí el debate ni tampoco mi análisis. Que yo no cobro, por ejemplo, de Atlético de Madrid TV, dependo de que me den una entrevista con alguien o me llegan mensajes de señores del club en mitad de las tertulias. No es el caso. Ojo, he visto a gente hacer el Camino de Santiago de rodillas en favor de algunos equipos y ser fulminados de las televisiones de esos clubes por no saber ni siquiera hacer bien la pelota. Pero no es el caso, porque para mí, salvo casos extremos, los culpables son varios en este deporte y hasta que en el Atlético no asuma cada parte implicada su cuota de culpa, el pupismo volverá a infectar todo lo que toque.

Ayer al Atlético le marcan un gol en el segundo 27 y el debate se centró en si era culpa del Cholo o no. Yo me pongo en el lugar de Nahuel Molina, que falló en su lateral, o en el de los defensas, que fallaron en las marcas, y respiro tranquilo porque la culpa se la van a echar al sistema, no a mí. ¿Qué pasa con eso? Que si un jugador siente que no es su culpa o su error, es bastante probable que lo vuelva a cometer. Total, él no hizo nada. Es víctima del sistema. Y al revés pasa lo mismo. Si el Cholo ve que cometiendo errores en el once y en la estrategia, sus defensores solo van a por los jugadores, el argentino seguirá enfrascado en algunos conceptos que están fallando a diario. Y así podemos seguir párrafo a párrafo con ejemplos puntuales que evidencian problemas generales.

Conclusión: este Atlético está perdido en una guerra civil que, sorpresa, al único que perjudica es al propio Atlético y mi opinión ya la conocen. Si mañana se va el Cholo, el problema seguirá ahí y si mañana se queda el Cholo y no se cambia ni mentalidad ni cabezonerías varias, el problema, adivinen, seguirá ahí. Directiva, Cholo y jugadores. Tres partes para un problema. No hay más.

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