En Los orígenes del totalitarismo, Hannah Arendt trazó el paralelismo y la identidad estructural entre el fascismo y el comunismo como formas ideológicas de un mismo fenómeno: el totalitarismo. Mismo perro, distinto color. Simone Weil insistía en la misma idea: "otro ejemplo admirable de absurdo sangrante es la oposición entre fascismo y comunismo (...) dos concepciones políticas y sociales casi idénticas (...) la misma unanimidad artificial (...) en beneficio de un partido único que se confunde con el Estado y se define por esa confusión".
De manera análoga, el postureo antifranquista de los socialistas se corresponde a sus actitudes intrínsecamente franquistas. La presidenta del Parlamento, la socialista Francina Armengol, ha reproducido los modos fascistas de negar la libertad de expresión censurando a un diputado de Vox que defendió el régimen franquista. Para los socialistas como Armengol, la "pluralidad política" queda dentro del ámbito de la izquierda porque, sin embargo, sí permitió la apología de los regímenes comunistas. En un régimen liberal, al que se oponen tanto franquistas como socialistas, se pueden expresar todas las opiniones políticas, siempre que no se recurra a la violencia, y luego será el pueblo el que decida, no una presidenta del Congreso que se cree la Jefa del Movimiento Nacional-Federalista Sanchista. En 1984, Orwell nos advertía contra el doblepensar impuesto en los sistemas totalitarios, un mecanismo de adoctrinamiento por el que se espera que los sujetos convertidos en siervos ideológicos acepten como verdadero lo que es claramente falso, o acepten simultáneamente dos ideas mutuamente contradictorias como correctas. Fíjense en este tuit de Armengol, paradigma del doblepensar de servidoras sanchistas como ella. Al mismo tiempo que censura las opiniones de su trinchera opuesta, declara enfáticamente
El Congreso es la casa de la palabra, de la libertad de expresión, del pluralismo, del debate. Es, en definitiva, la casa de la democracia. Y es responsabilidad de los y las demócratas que lo siga siendo.
Si no tuviera el cerebro horadado por el doblepensar y mantuviese un átomo de dignidad política y honestidad moral, una declaración así la llevaría a la dimisión inmediata para que el Parlamento estuviese limpio de sectarios odiadores como ella. Así, mientras se retiran las palabras del diputado de Vox, se mantienen las de un diputado de la extrema izquierda CUP que glorificó el totalitarismo comunista, otro de Bildu practicó el negacionismo del totalitarismo de los comunistas y, como guinda, el socialista Simancas defendió a un golpista contra la II República como Largo Caballero y a un terrorista como Santiago Carrillo durante la guerra civil.
Secuestrada RTVE por parte del PSOE y convertida en la misma televisión del gobierno que era durante el franquismo, los Fortes, Intxaurrondo y Broncano constituyen el nuevo somatén propagandístico con cargo al erario público y sometidos al argumentario de Ferraz. En este ambiente de degradación institucional, el pueblo es convertido en masa mientras una casta extractiva empobrece al país y los plutócratas socialistas se hacen ricos en este régimen de socialismo de amiguetes con mansiones en Venezuela y la República Dominicana. En el Congreso del PSOE, Zapatero, asesor de dictadores, ha lanzado el último bulo socialista de que los socialistas fueron los que permitieron que las mujeres estudiasen en España, como si Beatriz Galindo o Lucía de Medrano no hubiesen sido reconocidas ya en los siglos XV y XVI en Salamanca, o como si Clara Campoamor no hubiese conseguido su título de abogada antes de que los socialistas lanzasen una campaña de descrédito contra ella por haber conseguido el voto para las mujeres.
Esa secta denominada PSOE es la manifestación más clara de lo que Weil entendía como un partido único que se confunde con el Estado y se define por esa confusión. Viendo a la masa arengando a Sánchez, su mujer, su hermano y la dupla Chavez-Griñán cabe recordar la advertencia de Arendt: "El peor favor que puede hacerse un ser humano es el de no pensar. Así comienza el totalitarismo, la dictadura de lo igual".