Tan es así, que en mi ciudad-pueblo (en Cataluña) jamás se habían convocado manifestaciones por el 11 de septiembre más allá de una ofrenda floral, oficial, a la que no solía ir ni Dios, que se dice; y, éste año no sólo se ha hecho una para conmemorar la Diada (lo cual tendría un pase) sino que además al grito, y subrayo lo de grito (nada de manifestación festiva que dicen los cursis), pancartas en mano, pidiendo la independencia.
Aquí, en Cataluña, el nivel de agresividad en los ciudadanos cuando se toca el tema de la política, está aumentando de un modo que en ocasiones da miedo.
Cuanta razón le asiste, precisamente, desde dentro, aquí en Cataluña es donde se palpa a diario el fenómeno.
Unas gentes, autoctonas y "nou vingudes", indolentes y confiadas a las que "esta guerra", a pesar de la proximidad, les resulta lejana. Sin embargo, la Cataluña política y subvencionada, no para ni de dia ni de noche en su labor de zapa, con su turbia mirada puesta en ese oscuro tunel al que conducen al confiado rebaño que ni sabe ni contesta.
Agapito, le felicito por su expresión: "Se han percatado de que dar un golpe de Estado perfecto, algo parecido a lo del 11-M, no es tan fácil.". ¿Es que no está claro?
D. Agapito usted sabe también como yo que solo hay una solución, y esta pasa por retratarse, el tiempo de los paños calientes ha pasado, ya no vale ponerse de perfil. Esto como usted dice siempre ha causado dolor, en expaña no sera diferente.
Estado de derecho? Estado de derecho de pernada.
La voluntad del pueblo catalán no puede ser acallada por una Constitución que ni siquiera reconoce su existencia.
Esto no ha hecho más que empezar.