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Alberto Míguez

¡Todos a la cárcel!

Fidel Castro acaba de descubrir un método infalible, como todos los suyos, para meter en la cárcel a sus enemigos “gusanos”, exiliados en países iberoamericanos, más activos de lo que el régimen cubano puede aguantar. Se trata de acusarlos de terroristas y enviar una petición de extradición a los países anfitriones donde residen estas personas.

Una lista de 53 supuestos terroristas ha sido expedida a países como El Salvador, Venezuela, Honduras, Nicaragua, Guatemala y otros. Son “dossiers” preparados por la policía política castrista en los que se acusa a estas personas de crímenes horribles contra la humanidad, aunque no se aporte prueba alguna. Cualquier tribunal mínimamente informado y serio rechazaría esas soflamas. Pero estamos hablando de países muy especiales donde la Justicia y la Policía no siempre son un modelo de ecuanimidad.

Tras haber montado la marimorena con el supuesto complot para asesinarlo descubierto por los servicios de inteligencia cubanos en Panamá, Castro pretende ahora que el cabecilla Luis Posada Carriles sea extraditado a Cuba y Venezuela, país en el que –dice Castro- puso una bomba en un avión comercial.

Da la casualidad de que un tribunal venezolano juzgó a Posada Carriles por ese horrible delito y lo absolvió. Lo que no impidió que el eximido hubiera pasado ocho años en la cárcel hasta que, harto de esperar una libertad que no llegaba, huyó. Con tan débil expediente, difícilmente podrá la justicia venezolana pedir la extradición de este anciano al que nadie acusa en Panamá todavía de “actividades terroristas”: mientras no se demuestre lo contrario, Posada Carriles entró en Panamá con un pasaporte falsificado. Y eso es un delito de menor cuantía, punible administrativamente con una multa.

Ni la Policía ni la Justicia panameña han dicho una palabra sobre la posesión de ocho kilos de explosivos que los terminales propagandísticos del régimen castrista están extendiendo estos días.

Pero ¿a quién le interesa en Cuba la veracidad de tales acusaciones? De lo que se trata es de neutralizar a quienes en Iberoamérica o en América del Norte (México, USA, Canadá) luchan contra el régimen castrista. Castro ha descubierto el método para acabar con ellos con la complicidad de algunos policías y jueces venales. Oído al parche.

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