Menú
Andrés Benavente

ETA y el conflicto mapuche

Dentro del movimiento mapuche radicalizado que existe en Chile, el grupo denominado Coordinadora Arauco Malleco, promotor de acciones violetas, expresa abiertamente sus simpatías por el grupo terrorista ETA. En Resistencia Mapuche, hay una sección dedicada al terrorismo vasco, con vínculos a los documentos, publicaciones y comunicados del grupo terrorista.

Los responsables de la página de Resistencia Mapuche explican esta afinidad señalando que los vínculos hacia la documentación etarra es un aporte al entendimiento del conflicto que afecta "a nuestros hermanos del pueblo vasco" y a la vez "material de estudio para todos los jóvenes militantes mapuches que soñamos en estas tierras con la libertad de nuestro pueblo".

Señalan que entre ambas experiencias hay aproximaciones. Una de ellas sería la naturaleza de ambos conflictos: ser étnicos y plantearse el objetivo de la autonomía territorial. Otra tendría relación con la especificidad de cada conflicto "nacionalitario" (sic) la que está relacionada con la historia de cada nacionalidad. En función de la analogía, la Coordinadora indica que no basta demandar la restitución de tierras, pues esto no es expresión de un "conflicto nacionalitario", en cuanto "no cuestiona la conquista de los mapuches, la expoliación del territorio mapuche y la colonización de los mapuches por los chilenos". Es aquí donde la cuestión territorial, el retorno al "país mapuche" adquiere una connotación de lucha independentista, y entonces las formas de lucha, en su más amplia variedad, adquieren justificación en esta lógica que comienza a insinuarse como separatista.

Que esto sea planteado en democracia es algo que para los ideólogos chilenos no tiene importancia, pues para ellos el conflicto mapuche se basa en el derecho a la autodeterminación de los pueblos y la democracia, si bien garantiza derechos individuales, no les garantiza a los mapuches derechos en tanto nacionalidad.

Más claro aún, en función de este planteamiento rupturista con el Estado chileno, los mapuches radicalizados dirán en la publicación virtual Net Mapu, que esta perspectiva del conflicto invita al movimiento mapuche a avanzar a la conformación de una fuerza política nacionalitaria, condición sine qua non para una negociación futura, respondiendo interrogantes como las siguientes ¿cuál es el fundamento de la lucha?, ¿qué métodos usar? Es decir, la vía insurreccional en función de un objetivo separatista queda abierta.

Esta vinculación no sólo es declamativa. La Coordinadora Arauco-Malleco recibe importantes flujos de financiación de grupos europeos, bajo el argumento seudohumanitario de ayudar a minorías indígenas, y ciertamente representa un propósito de ETA de mantener una activa presencia en los conflictos sociales del mundo hispanoamericano.

En Internacional

    0
    comentarios