Como todo en la vida, el verano tiene sus cosas buenas, pero también tiene las malas. Me refiero a las indumentarias, es terrible ver a alguna gente en las playas en bañador con unos cuerpos, que hace falta tener mucho valor o carecer del sentido de la estética, más que lucirlos, sería mucho mejor esconderlos, me refiero a esa pareja tan elegante compuesta por ese hombre tan honesto ex edil del ayuntamiento de Marbella, que responde al nombre de Julián Muñóz y su nueva novia, una tal Karina, clónica de Maite Zaldivar, la que fuera esposa del alcalde chorizo.
Las fotos con esa "braga náutica" infecta, a esa edad y con ese body, en compañía de su churri, con ese tanga, que estaría mucho mejor con un jersey de cuello vuelto, me parecieron atroces, pero no contentos con eso, en vez de esconderse y no aparecer en todo el verano, nos vuelven a sorprender con otro reportaje todavía mucho más vomitivo, en la proa de un barco en Formentera.
Cuando las ví, lo primero que sentí fueron nauseas, hace falta tener poca vergüenza para consentir de esa manera tan descarada que te hagan esas fotos.
Hace falta tener la cara como el cemento de dura para salir en todas las revistas en un barco , en uno de los destinos más caros y más de moda del mediterráneo, cuando se tienen juicios pendientes con la justicia, por habérselo llevado " Calentito" del Ayuntamiento de Marbella. ¿Dónde está la justicia en éste país?
Viendo todo esto, indiscutiblemente al ex alcalde le gusta el mismo tipo de hembra. Después de salir a la luz estos magníficos reportajes, la tal Maite Zaldivar aprovecha para hacerse un bolo y de paso poner verde al que fuera su marido más de dos décadas.
En que estaría pensando Isabel Pantoja para liarse con este Tarzán, menos mal que se lo ha quitado de encima, aunque esa mancha va a ser del todo imposible que desaparezca.
Todavía queda mucho verano por delante esperemos que no haya una tercera entrega de estos reportajes que hacen que el verano se nos atragante, con lo agradable que es ver a otros personajes, mucho más divertidos, y con otro aspecto físico que hacen que podamos recrear la pestaña y hasta pasar un poco de envidia, pero como todo no va a ser negativo, les prometo que en breve escribiré de gente guapa, que la hay y mucha.