Borja Thyssen y Blanca Cuesta ya tienen a su segundo retoño. Eric, así es como se va a llamar, nació ayer a las 5 de la mañana en la Clínica Dexeus de Barcelona. El parto ha sido natural, como quería la madre, tanto ella como el bebé se encuentran en perfecto estado.
¡Cómo han cambiado las cosas! La pareja envió un comunicado a los medios de comunicación para anunciar la noticia. Si no hay complicaciones, el sábado está previsto, cuando le den el alta a Blanca, hacer un posado en la puerta del centro hospitalario para la prensa. Nada que ver con el nacimiento de su hijo Sacha, que fue todo vía exclusiva.
Lo primero que hizo Borja nada más ver la cara de su hijo fue llamar por teléfono a su madre para contarle la noticia. La baronesa se encuentra navegando por el Mediterráneo. Sabiendo que su nieto estaba a punto de nacer ese viaje podía haberlo retrasado unos días. Ahora habrá que ver lo que tarda la abuela en conocer a su nieto.
En principio, la relación entre madre e hijo iba por buen camino, la prueba es la llamada de Borja a su madre. De sobra es sabido que entre ellos hay problemas legales y a la vez sentimentales, ya que la relación entre madre e hijo era inexistente y esta llamada puede ser un paso muy importante para llegar a una reconciliación.
Ambos se necesitan mucho, Borja necesita a su madre y Tita a su hijo, aunque no hay que olvidar que la baronesa tiene que darle tres millones de euros a su hijo, fruto de la herencia del barón. Como Carmen Cervera no se acerque a Blanca, tiene todas las de perder, porque su hijo tiene una magnifica relación con su mujer y su matrimonio funciona perfectamente, y ella está más sola.
La Thyssen con lo lista que es para muchas cosas debería recapacitar y arreglar esa situación que no beneficia a ninguno, sino todo lo contrario. Esperemos que la llegada de éste nuevo miembro a la familia sea la solución a todos los problemas.