Lydia Bosch y Alberto Martín no tienen más remedio que volver a verse las caras ante un juez. Un divorcio polémico. La vista será hoy dia 20, y en ella se firmará la sentencia de divorcio y el convenio regulador del mismo, ya que hasta la fecha, sólo había unas medidas provisionales dictadas en mayo.
En principio, en ese mes se hubiera podido firmar, pero los abogados de Alberto Martín solicitaron su aplazamiento hasta ahora, ya que el arquitecto quiere tener la custodia compartida, y para eso los mellizos tenían que someterse a unas pruebas psicológicas.
La actriz acudió hace unos días al estreno de la obra de teatro protagonizada por Concha Velasco "La vida por delante" y afirmó sentirse muy tranquila, aunque la procesión vaya por dentro.
Ningún divorcio es agradable. Los hay más y menos civilizados y sin lugar a dudas éste es de los peores, aunque haya que poner buena cara. De momento, la actriz está muy volcada en su vuelta al trabajo y próximamente la veremos encarnando un papel de monja en la serie de televisión "Águila Roja".
Hace unos días también se le pudo ver acompañando a sus hijos en su primer día de colegio. No quiso decir nada sobre su comparecencia de hoy en El Juzgado de Pozuelo de Alarcón.
El verano de Lydia ha sido tranquilo. En un principio saltó la noticia: Se especulaba si podría haber algo entre ella y el también actor José Coronado, pero enseguida se aclaró todo: simplemente coincidieron en un hotel, en la isla de Tenerife, cada uno con sus respectivos hijos. También hay que recordar que la hija mayor de la actriz es fruto de la relación que tuvo con Miki Molina. Por otro lado, José Coronado es padre de una niña que tuvo con Mónica Molina y por ese motivo, los hijos de ambos son primos.
Un divorcio complicado ya que hay una denuncia por medio, presentada por Lydia, de abusos a su hija mayor por parte de su ex marido, un tema muy delicado y serio.
La catalana exigía en un principio la custodia de los hijos del matrimonio, unos 20.000 € de manutención, la vivienda familiar valorada en unos 4 millones de € y un buen porcentaje de los bienes gananciales.
Al principio, se comentó que Alberto Martín estaría dispuesto a vender la residencia familiar y dividir lo obtenido, pero que no estaba dispuesto a renunciar a la custodia compartida de sus hijos.
Ellos se casaron en régimen de separación de bienes, pero lo cierto es que hay sociedades en común.
Hoy es un día clave para que todo se solucione lo mejor posible, solo hay que esperar lo que dictaminen los jueces.