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Carlos Rodríguez Braun

Zapatero, del superávit al ridículo

Considerando que dicha expansión ha sido mundial, como se ve en la simultaneidad de las burbujas en América, Europa y Asia, sostener que la crisis es culpa de Bush es un disparate, pero es un disparate electoral y entrañablemente ridículo.

Le dijo Rodríguez Zapatero a Pedro J. que el futuro de la economía española no pasa "ni por la recesión ni por los recortes, y que el 2 % de superávit asegura que se podrá subir más el salario mínimo, las pensiones más bajas, las becas y el bienestar social". En su reunión con el líder preclaro, los empresarios de la CEOE "le pidieron que interceda ante los bancos para que no restrinjan liquidez". Y finalmente Zapatero, según leí también en El Mundo, brindó este diagnóstico sobre la crisis: se debe a las "recetas neoconservadoras" de Bush.

Aparte de lo notable que resulta ver a los mismos que hace nada defendían el déficit cantar ahora las loas del superávit, aún más notable es la concepción mágica que tienen del saldo presupuestario. En primer lugar, es bueno de por sí, independientemente de que haya sido generado conteniendo el gasto público o, como ha sido en realidad, incrementando la recaudación impositiva. Y en según lugar, es bueno para todo. Es un tesoro que está ahí, que no es de los ciudadanos sino del Gobierno, y que sirve para las cosas más variopintas, como subir el salario mínimo, algo que no tiene nada que ver con el presupuesto...salvo que Zapatero admita que esa subida aumenta el paro, y por tanto el gasto en subsidio de desempleo, lo que sería tan cierto como revelador. Elevar las pensiones con el superávit comporta arriesgar aún más la Seguridad Social para cuando el ciclo se invierta. Y no está claro cómo amplía el "bienestar social" el Gobierno al gastar en los ciudadanos un dinero que antes le ha quitado a los ciudadanos.

Interceder es, según el DRAE, "hablar a favor de alguien para conseguirle un bien o librarlo de un mal". No se entiende qué beneficio otorgará a los empresarios en general una expansión mayor de la liquidez, que es precisamente lo que ha llevado a la sobreinversión y por tanto a los problemas que padecemos.

Considerando que dicha expansión ha sido mundial, como se ve en la simultaneidad de las burbujas en América, Europa y Asia, sostener que la crisis es culpa de Bush es un disparate, pero es un disparate electoral y entrañablemente ridículo. Porque según Rodríguez Zapatero las supuestamente malditas "recetas neoconservadores" son de Bush ¡y de Pizarro!

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