Se acabó la Liga. No hay más que hablar. Nadie se esperaba que el Madrid perdiera ante el Sporting en el Bernabeu, pero lo cierto es que los asturianos dejaron helados al conjunto de Mourinho con una victoria muy trabajada. Es verdad que a lo mejor no fue lo más justo porque el Madrid dominó más pero así es el fútbol.
Pareció que el equipo blanco estuviera pensando en el compromiso de esta semana en la Champions. Es verdad que es lo más importante ahora si descontamos la final de Copa, que también será muy intensa, el 20 de abril, en Mestalla. El Madrid pasó los octavos de final de la máxima competición europea por primera vez en seis años y una vez en estos cuartos y conocido el rival, el Tottenham no es nada del otro mundo, el equipo se va a centrar en estas lides.
No desaprovechó el Barça el regalo y ganó en Villarreal. Con polémica pero justamente. Es mano de Piqué en el gol azulgrana pero fueron los únicos que buscaron el partido. El Villarreal no lo hizo, traicionó su estilo, algo muy lícito si quieres parar al Barça, pero que lo pagaron con la derrota. Si tú eres uno en 29 partidos no puedes ser otro en el 30. Así pasa luego.
Esto también nos lleva a la reflexión más inmediata. El Madrid con bajas, una de ellas Xabi Alonso, pierde y no crea fútbol. El Barça con las bajas de Xavi y Messi medio partido, gana. Es así de simple. No es que haya diferencias sustanciales en plantilla, quizá incluso la del Madrid es más amplia, pero el fútbol de uno y otro está a años luz.
Queda poco para comprobar si este estilo le vale al Barça para ganarle todos los títulos al Madrid. El de Liga sí, pero La Copa y la posible semifinal de Champions hay que verlo. Y lo vamos a ver en dos semanas