El presidente de la Comisión Nacional de la Energía, Pedro Meroño, acaba de despacharse con unas declaraciones entre alarmantes y polémicas. Según Meroño, quien parece querer ponerse la venda antes de que se produzca la herida, en España no hay riesgo de apagón, como en California, pero podría producirse este verano en las zonas turísticas de Levante y algunos puntos de Galicia. Y la pregunta es ¿por qué?
Pedro Mielgo, presidente de Red Eléctrica Española, la compañía que gestiona la red de alta tensión en España, ha dicho que nuestro país tiene capacidad de producción suficiente para atender la demanda. De hecho, cuando se alcanzó el máximo histórico, en el sistema había electricidad suficiente para atender esa demanda y la de todo Portugal. El problema, por tanto, no está en la generación. Tampoco en el transporte porque la red de alta tensión llega a todos los puntos de España y conforma un sistema único e integrado que permite el transvase de excedentes de energía entre dos o varios puntos de la península Ibérica, por muy alejados que se encuentren entre sí.
Entonces, ¿a qué vienen las palabras catastrofistas de Meroño? Muy probablemente a la insuficiencia de capacidad de transporte en la red de baja tensión, esto es, la que llega a los hogares y que es propiedad de las compañías eléctricas. Aquí está el quid de la cuestión. En el Levante español, el turismo no deja de crecer año tras año de forma que empieza a desbordar la capacidad de atender la demanda creciente de energía eléctrica a través de la red de baja tensión.
Las compañías eléctricas, en algunos casos, han intentado realizar inversiones para aumentar la capacidad de dicha red. Pero han chocado de frente con los ayuntamientos y sus regulaciones medioambientales, que les han impedido llevar a cabo sus planes. Ésta es la raíz del problema que denuncia Meroño. Por tanto, si este verano hay apagones en Levante, la principal responsable será la corporación municipal de turno, no las empresas eléctricas y, ni mucho menos, Red Eléctrica, que, por ley, sólo puede invertir en la red de alta tensión.
Por supuesto, si este verano hay apagones, oiremos hablar de similitudes con California y de que esto pasa con las liberalizaciones. Pero eso será una crítica injusta que, por el contrario, debería centrarse en las regulaciones administrativas... y a lo mejor en las propias compañías eléctricas.
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