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Encarna Jiménez

Parlamento feliz

El programa “Parlamento” que dedica TVE a lo que se guisa en el Congreso y el Senado es, en términos televisivos, casi clandestino. Si su anterior director, Santiago López Ramos, no hubiera tenido que dimitir por haber opinado en un medio escrito de escasa difusión en contra de Leyre Pajín, ni los diputados y senadores se hubieran acordado de que tienen un programa a su disposición. “Parlamento” pasa desapercibido por emitirse los sábados por la mañana en “La 2” de TVE, pero, sobre todo, porque está pensado para no molestar a nadie. Es un programa tan de consenso que tiene aires de publirreportaje. Esta semana, el sumario incluía algunos temas de actualidad candente como la Ley de Partidos o la propuesta del PSOE presentada por López Garrido para que se tipifique en el código penal español el acoso moral en el trabajo, sin embargo, de los 60 minutos que tiene el programa, casi 40 se dedicaron a cuestiones agrarias. Reportajes sobre secano y regadío, comparecencia del ministro de Agricultura en el Congreso y coloquio entre representantes de PP, PSOE, IU y CiU sobre el Plan Hidrológico y el Plan de regadíos coparon el programa.

Nadie duda de la importancia del PHN, pero es bastante indicativo de lo que pretende este programa que se pase de puntillas en lo que es más jugoso y de mayor actualidad, y se monte un debate en el que cuatro representantes políticos hacen su papel sin demasiada convicción sobre un asunto que no ocupa las primeras páginas en estos momentos. Con ese planteamiento lo que se pretende no es que el telespectador se interese por lo que ocurre en las Cortes, sino que se traslade un pacto de información de perfil bajo.

Esa es la manera de que los españoles no se enteren demasiado de la pobreza y el adocenamiento que demuestran muchos de nuestros representantes y de que “Parlamento” siga sin dar sobresaltos a los jefes. Para eso la fantástica voz de Lombao en es perfecta: un tono institucional sin grandes altibajos que de la seguridad a representantes y representados de que podemos dormir hasta tarde en la mañana del sábado.

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