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Encarna Jiménez

¡Paso al bus!

El gran atasco de Barcelona no impidió la salida del que será a lo largo de cien días el vehículo más celebrado de toda España. Antena 3, Vía Digital y Quiero TV nos van a tener al tanto de lo que ocurre con nueve pasajeros seleccionados entre 120.000 aspirantes a ser observados. Los espectadores más atentos, que suelen ser jóvenes, van a tener la ocasión, como en “Gran Hermano”, de mostrar sus filias y fobias con una cuadrilla que tiene un perfil parecido al de Iván, Ismael o Ania. Todos parecen sanos, son deportistas, tienen bastante ánimo y están de buen ver. Los chicos suelen tener novia y las chicas no dicen nada, pero entre ellas hay una Vanessa, como toca, aunque se apellide Jiménez.

“El bus” se ha puesto en marcha con la lección aprendida y, técnicamente, parece bien montado. Es difícil que tenga un pelotazo de audiencia, porque no cuenta con el factor sorpresa al seguir la pista de “GH”, tampoco tiene una presentadora que dé morbo, sino una profesional sin recámara como Inés Ballester y un simpático de oficio llamado Liborio que son pura amabilidad. Eso elimina los insultos en la red que sufrió Mercedes Milá, y que sirvieron para animar el cotarro en Tele 5, pero, a cambio, la parada en distintas localidades permitirá la exaltación de los pueblos españoles y sus gentes de manera más organizada.

A pesar de que la guerra del carburante puede hacer que cualquier “tractorada” le corte el paso al autobús de los “ocupantes” y el camión de los técnicos, el espectáculo está asegurado. Hay un cocinero vasco, tres chicos guapos, una aragonesa, una navarra y un par de andaluces que están dispuestos a llamar la atención y, sobre todo, una productora de Telefónica que va a echar el resto.

Con estos ingredientes no se va a venir abajo el proyecto, como está ocurriendo con ese “Supervivientes” de saldo que ha comprado Tele 5, aunque habría que meter algún elemento en el menú que le de nuevas ideas a Gustavo Bueno sobre los experimentos antropológicos promovidos por la televisión. Si la cosa no se anima, pueden sacar de la cabina a Juan y José, esos conductores maduros que acarrearán carne moza por toda España hasta Nochebuena. Parecen lo más interesante de la comitiva.

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