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Como en la célebre canción de los años del hambre, el Gobierno ha decidido tirar por la calle de enmedio y parecerse a la caricatura de los señoritos manirrotos y las modistillas presumidas que se meten en deudas que no podrán pagar. Sólo falta que los chicos de la nueva Operación Triunfo coloquen en los móviles una sintonía tal que así: "¡A lo loco, a lo loco, cómo tira el dinero Zaplana! ¡A lo loco, a lo loco, hay que ver como Aznar desparrama! ¡A lo loco, a lo loco, hay que ver cómo Rato se hundió! ¡A lo loco a lo loco, a lo loco, el PP nos arruina mejor!"

"¡Hala, hala, a lo loco!", se ha dicho Teófila Martínez. Y también se ha lanzado por el camino de la contrarreforma laboral, económica y fiscal. ¿Quién dijo que el PER era malo? Algún liberalote trasnochado, huérfano de toda sensibilidad centrista. ¡Vayamos todos, y el PP el primero, por la senda del voto cautivo y la subvención generalizada!

Ahora bien, puestos a votar al que pague el PER, seguirán votando al PSOE. Entre el original y la copia, siempre el original. Que también es triste, haber quedado en la pálida copia de Chaves.