Pedro Sánchez es presidente en funciones. Y seguirá siéndolo aunque las negociaciones para formar Gobierno no den fruto. En caso de que consiga los apoyos para la investidura, tendremos Sánchez cuatro años más. Y si no los consigue, puede disolver las Cortes, obtener un tiempo extra como presidente en funciones… y esperar que las urnas mejoren su resultado y empeoren el de sus rivales.
En fin, de eso va la ControVersia de esta semana. Fray Josepho pronostica nuevos comicios, mientras que Monsieur de Sans-Foy cree que Pedro Sánchez será investido sin necesidad de ello.
ESTE ANTICIPA ELECCIONES
por Fray Josepho
–¿Cómo conservará el mando?
–¡Aguantando!
–¿Aguantando qué cuestión?
–¡El tirón!
–¿Y si en tal cosa se afana?...
–¡Gana!
Si el diálogo se empantana
y no se forma Gobierno,
a Sánchez le importa un cuerno:
aguantando el tirón, gana.
–¿Gana Sánchez si no cede?
–¡Puede!
–Para ello, ¿qué debe hacer?
–¡Disolver!
–¿Disolver qué? (¡No lo exhortes!)
–¡Las Cortes!
Sánchez tiene los resortes:
si los de Galapagar
no le dejan gobernar,
puede disolver las Cortes.
–¿Habrá urnas? ¿Se atreverá?
–¡Habrá!
–¿Qué habrá? (¿Le echará cojones?)
–¡Elecciones!
–¿Y gana? (¡Lo tiene a huevo!)
–¡De nuevo!
A pronosticar me atrevo
que si, en un momento dado,
se ve un pelín apurado,
habrá elecciones de nuevo.
DE ELECCIONES, NADA
por Monsieur de Sans-Foy
¿Que si va a sacar Gobierno?
¡Por supuesto que lo saca!
Si repites elecciones,
¿cuántos hartos, cuántas hartas
ya, de puro aburrimiento,
se van a quedar en casa?
(Y esa es una lotería
que no tiene puta gracia...
porque juega con el sueldo
de la grey parlamentaria).
Sánchez es un marrullero
y un tramposo, pero pacta.
Y aunque todo el mundo sabe
que es un hombre sin palabra,
mientras saque el presupuesto,
puede hacer mil filigranas
y aguantar, a tanto el voto,
una buena temporada:
unas veces, PNV,
otras, Coalición Canaria,
otras, Bildu con Podemos
y Esquerra Republicana.
Y así irá trastabillando
con los destinos de España
y cargándonos de deudas,
mientras todo el mundo habla
de qué coño hacer con Franco,
del gasoil y la eutanasia.
Sánchez hace un edificio
con tres barajas de cartas
y lo vende en soluciones
habitacionales varias.
Pedro Sánchez no se rinde:
como el óxido, se agarra
hasta que se pudra el barco
y naufrague con su carga.
No te engañes, Fray Josepho,
porque, de elecciones, nada.