En una decisión heroica, el Fútbol Club Barcelona va a retirar a Francisco Franco las tres medallas de oro y brillantes que le concedió (aunque la prensa habla de dos condecoraciones, José García Domínguez reveló en estas páginas que fueron tres).
Tres medallas le dieron al Caudillo.
No una sola ni dos. Tres galardones.
Tres estupendas condecoraciones,
de diamantes y oro. De gran brillo.
Tres medallas a Franco. Qué sencillo:
llevarse bien con Franco daba opciones
de conseguir recalificaciones
más o menos así, de tapadillo.
Pero ahora, de pronto, han descubierto
que, tras cuarenta y cuatro otoños muerto,
por fin llegó el momento del desquite.
Y así, este club, valiente y con agallas,
ha acordado quitarle las medallas,
pues no es probable ya que resucite.