Los grandes empresas mantienen su condición en todos los lados. No importa el ámbito por el que extiendan sus tentáculos, acaban atrapando todo lo que se ponga por delante. Incluso Internet. La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha publicado su estudio anual, correspondiente a 2002, en el que se dejan claros algunos puntos que definen la situación en la que se encuentra el comercio electrónico español a día de hoy. Entre otros, que los grandes del mundo real lo son también del mundo on line.
Lo más relevante es que los viajes son lo que más atraen a los internautas a la hora de realizar una transacción on line. Y dentro del sector, la compañía Iberia es la que se lleva el gato al agua de forma más clara. Del total de ventas que se realizaron por Internet en España durante el año pasado, un 23,6 por ciento las monopolizó la compañía aérea. Este porcentaje le permitió facturar cien millones de euros, un 78 por ciento obtenido mediante las ventas en España y el 22 por ciento restante en el resto de Europa y América.
Que sea una compañía aérea la locomotora del comercio electrónico en España no es extraño. El sector de viajes (ya sea alquiler de plazas hoteleras, coches, compra de billetes de avión o paquetes turísticos) es también el más importante de la Red en un gigante como Estados Unidos.
Tanto es el dinero que se está amasando en este concepto, que ha hecho cambiar modelos establecidos dentro del sector. Desde hace un par de años, las principales compañías aéreas y agencias de viajes mantienen una tensa batalla en torno a las tasas que las primeras pagan a las segundas por hacer de intermediarias a la hora de vender billetes de avión. Desesperadas por al alto coste que implican estas comisiones, las aerolíneas han mejorado sus sitios web para comercializar directamente los billetes.
Más sorprendente es que una entidad bancaria sea la que ocupe el segundo lugar en la lista de los líderes del e-commerce español. La Caixa se lleva el 17,9 por ciento de cuota de mercado al facturar 59 millones de euros. Es, sin duda, una excelente noticia para un sector que siempre se ha topado con el escepticismo de los internautas.
Lógico es que El Corte Inglés, con el 10,4 por ciento y 34,5 millones de euros, se aloje en la tercera posición. Su web de compra es una de las mejores de Internet con un número elevado de ofertas y canales.
No obstante, una vez analizados los datos, existe un punto que contribuye a la desesperación: Iberia, La Caixa o El Corte Inglés son los líderes, de acuerdo. Pero por el bien del comercio electrónico hubiera sido mejor que en los primeros puestos aparecieran, pongamos por caso, Lastminute.com, Amazon o Patagon. Es decir, empresas que se crearon por y para Internet.
Queda claro que el valor de marca es un punto capital a la hora de realizar una transacción económica on line. Tal vez el miedo a que una puntocom no preste el mismo servicio que una empresa de ladrillo con un sucursal en Internet sea una de las principales razones que contribuyen a esta situación. Se trata, nunca está de más repetirlo, de un grave error que representa una piedra en el camino de los negocios digitales.
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