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Ignacio Villa

La gripe europea

se ha excusado de una forma que ya comienza a ser habitual con el presidente del Gobierno español . No hay que irse muy lejos, cuando esta misma semana el presidente de Colombia.

Este viernes hemos asistido a la aparición en el escenario político de una nueva enfermedad, no sabemos si contagiosa, pero que afecta directamente a los líderes políticos europeos. Y es que el presidente Zapatero había preparado en Barcelona un acto  público - al que llaman cívico- para el apoyo al nuevo Tratado europeo. En ese acto estaba prevista la presencia del presidente francés, del primer ministro italiano y del canciller alemán. Al final una extraña gripe repentina e intensa ha provocado que Berlusconi y Schröeder cancelaran sus asistencia. Dejando sólos, mano a mano, a Zapatero y a Chirac.

No se sabe sí esta gripe demoledora está provocada por la compañía de ZP o por la defensa del nuevo Tratado Constitucional. Quizá sean las dos cosas. Desde luego la fotografía del canciller alemán riéndose en un mitin celebrado en la misma mañana del viernes en la ciudad alemana de Kiel, explican que lo de Schröeder tiene poca pinta de gripe. Más bien, significa que se ha excusado de una forma que ya comienza a ser habitual con el presidente del Gobierno español . No hay que irse muy lejos, cuando esta misma semana el presidente de Colombia, Alvaro Uribe, también cancelaba una Visita de Estado a España por una gripe, quizá provocada por el viaje secreto del ministro Bono a Venezuela.

En fin, ¡que cosas tiene la vida!. Al final el presidente Chirac, enemigo declarado del peso específico de España en Europa, ha sido quién ha tenido que venir de urgencia para echar una mano a Zapatero en este referendum europeo convertido en un plebiscito personal. El presidente francés obsesionado con el poder de España en Bruselas, ayudando a Zapatero. ¡Menuda ayuda y menudos amigos!.

La realidad es que la campaña sobre el referendum europero peor no le puede sali al Gobierno. Con "los del Rio", "los Morancos", la gripe europea y la desorientación de todo el Gobierno pidiendo un "sí" que no se cree nadie. Al final lo que ha conseguido el Ejecutivo es que el "NO" sea cada vez más rotundo y general. Y es que sinceramente Zapatero no se merece nada. Sólo con un "NO" se puede mostrar la negativa a la acción del actual Ejecutivo.

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