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Champions League

Isidoro San José

Orgullo madrileño, orgullo madridista

Madrid fue la capital del fútbol, a pesar de que se jugó en Lisboa, y la ciudad que siemnpre quedará grabada en la memoria madridista.

Para empezar, no debemos quedarnos con el resultado de la final de la Liga de Campeones, que ha sido un poco abultado para lo que hemos visto en los 120 minutos que ha durado el partido. En cuanto al Atlético, nos debemos quedar con que ha sido un rival durísimo, que no ha dejado de pelear en ningún momento. Y prueba de ello es que hasta el minuto 93 no ha podido empatar el Real Madrid el encuentro.

Haciendo un repaso por lo que ha sido el partido, ese primer gol de Atlético ha llegado por una falta de coordinación por parte del Real Madrid, entre la defensa y el portero. Y ésa ha sido la única ocasión clara que ha tenido el Atlético de Madrid. En realidad, ha sido un partido falto de ocasiones de gol por ambos bandos. De hecho, los dos porteros, fallo aparte, han pasado completamente desapercibidos, sin trabajo.

Todo el partido ha sido como esperábamos: con mucha emoción, sobre todo en los primeros 90 minutos, mucha intensidad, tensión... pero poco juego. El poco que ha habido lo ha puesto el Real Madrid. No ha sido un dominio claro, pero han hecho más. Sobre todo, a raíz del gol de Sergio Ramos, que ha subido la moral del equipo y ha levantado al conjunto blanco.

Un Sergio Ramos que, además, es el jugador que yo destacaría por encima de todos. Es complicado destacar a uno de la final de Lisboa. Por eso, por la importancia de esa jugada, de ese gol, que ha vuelto a meter al Madrid en la final, me quedo con la figura del central de Camas.

Siento orgullo como madridista y como madrileño. Pero, sin duda, lo mejor es haber conquistado la Décima. Ese título que ya está en la vitrinas, que ya es para todos los aficionados del Real Madrid. Lo malo, que siempre hay algo malo, han sido esos últimos minutos. Quizá hayan sobrado, con un resultado tan abultado, que ha propiciado que muchos hayan perdido los nervios. Demasiada tensión acumulada que ha dejado un mala imagen final.

Pero no debemos quedarnos con ello. Si no más bien con todo lo que ha habido antes, hasta los últimos minutos finales de la prórroga. Porque ha sido un partido, con una prórroga, muy divertida, entretenida, y sobre todo, incierta.

Pero sí, me quedaría con que Madrid, la ciudad, ha estado en boca de todos. Aunque se ha jugado en Lisboa, ha sido la capital del fútbol. Y los dos equipos han dado un nivel de juego y de saber llegar a una final como pocos. Me enorgullloce por lo dicho, porque como madrileño es algo único. Y como madridista, muy difícil de igualar tener algo que otros equipos, si es que llegan, van a tardar mucho en conseguir, que es la Décima.

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