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José Antonio Martínez-Abarca

Rajoy no debe hacerse fotos con la derecha

El señor Enric Sopena debe entender que la obligación de un político es retratarse junto a lo que sea, incluso aunque se trate de un colaborador de un medio de Jiménez Losantos que se ha valido de malas artes para sacar la foto.

El otro día, un periódico en internet que se intitula "progresista" me sacaba en portada junto al líder del PP, Mariano Rajoy. ¿Qué hace un moderado como quiere ser Mariano fotografiándose al lado de articulistas de Libertad Digital como ese, individuo de la derecha que frivoliza con la violencia de género?, venía más o menos a decir el titular de la columna que me dedicaba enterita su director, uno que sale mucho en el 59 segundos de la tele que se hace llamar Enric Sopena. Al primer ministro italiano Giulio Andreotti le hicieron también una foto con el "capo di tutti capi" de la Cosa Nostra y se vio en muchas dificultades para explicar qué hacía allí con semejante compañía. Aunque imagino que lo de Mariano es harto más grave.

Mariano Rajoy no puede explicar qué hace él en esa fotografía, se supone que comprometedora, junto al que firma. Sencillamente porque no creo que Mariano Rajoy tenga más que vagas nociones de aquella lejana tarde, recién perdidas sus primeras elecciones, en un pueblito del sureste peninsular, y desde luego tendrá mucho menos que vagas nociones sobre la identidad de esa auténtica amenaza para el éxito del viaje al centro que aparece agarrándole por detrás de la cintura, o sea, yo.

Me echo toda la culpa, porque quiero lo mejor para Mariano, y me incomoda que le riñan los que mandan. Vamos a decir que Mariano creía estar tratando con un miembro del colectivo antiglobalizador "attac" o con un redactor de algún fanzine "okupa" más o menos barcelonés. Sólo faltaría que Mariano Rajoy haya leído a Enric Sopena o se lo encuentre en el 59 segundos y por culpa de mi inoportuno careto se arruinen las "nuevas formas" del PP. Por experiencia sé que en el actual PP son especialmente sensibles a todo cuanto denuncia el progresismo. Casi casi tan sensibles como son a todo cuanto denuncia el nacionalismo.

Pero el señor Enric Sopena debe entender que la obligación de un político es retratarse junto a lo que sea, incluso aunque se trate de un colaborador de un medio de Jiménez Losantos que se ha valido de malas artes para sacar la foto. En mi tierra los del PP deben aguantar a pie firme que en muchas de sus fotos salga, por alguna esquina, un digamos agitador o ideólogo a quien apodan "el Johnny", creador de un famoso pareado sobre la ex ministra de medio ambiente Cristina Narbona y su oposición a los trasvases: "el agua de maceta/ Narbona pa tu seta".

Y seguramente "el Johnny" tiene también su foto junto a Mariano Rajoy. ¿Quiere eso decir, como escribiría Enric Sopena, que Mariano ha puesto música como cooperador necesario a las letras de "el Johnny", igual que se le acusa de amparar el maltrato por salir en una foto con alguien que ha escrito que no pocas mujeres consienten que les peguen sus maromos y encima insultan a quien las defiende? Y todo ante el ocultamiento feminista, ya que en el mundo a colores de la corrección política esas cosas no pasan. Con el cuidado que está poniendo Mariano en no molestar (ya lo escribe Houellebecq: "antes me prohibían los curas y los militares lo mismo que ahora las feministas y los jueces"), ha tenido que llegar alguien sin carné de demócrata en regla a aparecer en una instantánea procedente de su oscuro pasado como heredero de Aznar. Estoy esperando a que llegue el motorista del PP a purgarme por salir en fotos donde nadie me llama.

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