Estoy hecho un lío. Según los datos que refleja una encuesta realizada por el diario Sport, un setenta y siete por ciento de las personas consultadas creen que existe una "mano negra" contra el Fútbol Club Barcelona. A la pregunta de "¿quién la maneja?" (la "mano negra"), un cuarenta y cinco por ciento piensa que el Gobierno del Partido Popular, mientras que un treinta y siete por ciento se inclina por pensar que el causante de todo es el "lobby madrileño". La pregunta más sorprendente (e inquietante) de todas es la siguiente: "¿piensa que al Barcelona le pasa factura la pancarta por la paz?" (y es que el otro día los jugadores del Barcelona sostuvieron todos una pancarta contraria a la guerra). Pues bien, ¡un setenta y cuatro por ciento de los encuestados piensan que sí, que les pasa factura!...
Lo del "lobby" pase, pero lo de la pancarta no hay quien se lo trague. Tendría cierta lógica que el cuarenta por ciento de los encuestados que piensan que el P.P. será responsable del cierre del Camp Nou, preguntados a su vez si piensan que la pancarta a favor de la paz les pasa factura respondieran inmediatamente que sí. Pero ¿y el veintinueve por ciento restante?... Tendrían que salir necesariamente de aquellos que piensan que es el "lobby madrileño" el causante de todo. ¿Estaría entonces el "lobby" a favor de la guerra o no?
Estoy hecho un verdadero lío... El CIS hizo hace poco otra encuesta en la que el noventa y uno por ciento de los españoles éramos contrarios a la guerra. Si ahora –según la encuesta del "Sport"– existe un setenta y cuatro por ciento de personas que piensan que manifestarse públicamente a favor de la paz le está pasando factura al Barcelona... ¿es que ese setenta y cuatro por ciento piensa que el otro noventa y uno no son de nacionalidad española o qué?... No entiendo nada. Lo que desconozco es qué habría respondido la gente si, entre "Gobierno" y "lobby de Madrid", José María Casanovas hubiera intercalado "monstruo de las galletas" como opción posible a la pregunta de "¿quién maneja la mano negra?". Yo habría respondido "monstruo de las galletas".
Es mucho más fácil. El Camp Nou lo cerrarán cien descerebrados que lanzaron al césped botellas de "JB" y una cabeza de cochinillo. El Camp Nou lo cerrará Joan Gaspart que, tras aquel partido, dijo, todo ufano y orgulloso, que Luis Figo había ido a provocar. El Camp Nou será clausurado como resultado de un ambiente hostil generado, por ejemplo, con encuestas como la anteriormente citada. A ver si aprendemos a hacer las encuestas...
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